Hace apenas unas semanas el presidente Andrés Manuel López Obrador, en su conferencia de prensa, advirtió a todos los mexicanos tener cuidado con los “montadeudas”, modalidad que está utilizando el crimen organizado para extorsionar a aquellas personas que deciden contratar esos servicios.
Algo muy similar están viviendo algunos comerciantes y empresarios de distintas partes del país y Veracruz no es la excepción, porque un empresario cafetalero de Coatepec solicitó un préstamo personal por un millón y medio de pesos que pagó en el plazo establecido, pero de manera arbitraria le han seguido cobrando, por lo que tuvo que acudir a las instancias legales.
Los denunciados enfrentan ahora el proceso penal 45/2022, en los juzgados de Juicios Orales del Distrito Judicial de Coatepec y se trata de los medio hermanos, Edna Lizbeth “N” y el médico militar Gerardo “N”, quienes se ostentan como familiares de prestigiados empresarios de la ciudad de Veracruz.
Resulta que la víctima de este acoso solicitó el préstamo al padre de los denunciados pero el prestamista falleció, entonces a ellos se les hizo fácil falsificar documentos para beneficiarse y se sometieron a un juicio mercantil, sin embargo, el Ministerio Público de Coatepec que tomó conocimiento, ordenó que el expediente fuera turnado ante un juez de control.
Después de someter a un estudio grafológico, por parte de los peritos la firma de la persona afectada, se comprobó que había sido falsificada, por lo que fueron señalados del delito de falsificación y tendrán que responder por esas denuncias.
El problema tenía que ser resuelto por las autoridades judiciales para dejar en claro que se trataba de una posible extorsión y que, como este caso podría haber otros más, que no han sido denunciados a veces porque son montos pequeños de la deuda, pero los agiotistas no perdonan nada y amenazan de distintas formas si no se paga en la fecha señalada.
Los medio hermanos Edna Lizbeth “N” y el médico militar Gerardo “N” ahora tendrán que responder por esa actitud agresiva en contra del empresario cafetalero, y es posible que se les acumulen otras denuncias por delitos similares.
Ambos han utilizados sus estrategias para no presentarse a las audiencias, como la que ocurrió este miércoles, que por medio de sus abogados presentaron dos certificados de médicos particulares, donde supuestamente tenían síntomas de Covid-19.
Como las recetas no eran expedidas por una institución oficial, los acusados fueron apercibidos por el Juez de Control, programando la próxima audiencia el 22 de agosto. Así es que mucho cuidado con esas “ofertas” de dinero que las ofrecen con sonrisas pero después se vuelven amenazas. Más claro ni el agua.