La organización no gubernamental México, ¿cómo vamos?, actualizó su semáforo económico estatal, en el que informa que al corte de octubre pasado, Veracruz registró la generación de 13 mil 318 empleos formales en el año.
Dos puntos destacan de dicha información: primero, que a diferencia de los meses de la pandemia de Coronavirus, en 2023 no se registró la pérdida de espacios laborales; y segundo, que la entidad sigue lejos de la meta anual de crear 56 mil empleos.
De acuerdo con la fuente, durante el presente año Veracruz ha crecido a un ritmo de 3.1 por ciento, lo cual ubica al estado debajo de las estimaciones oficiales: la estimación oportuna del Producto Interno Bruto, del INEGI, estableció para el tercer trimestre del año un crecimiento anual de 3.3 por ciento.
El dato de la ONG en cuanto a la pobreza laboral no ha sido actualizado y sólo contempla una comparación entre el segundo trimestre de 2022 y el mismo periodo del presente año; este indicador pasó de 51.9 a 56.3 por ciento; en tanto que la informalidad laboral pasó de 61.3 a 63.8 por ciento.
En el tema del desempleo; sin embargo, la información oficial consigna una realidad mucho más optimista; la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, del INEGI, ubicó en 1.8 por ciento la cifra de la desocupación en Veracruz durante agosto pasado.
Ello indica que de la población económicamente activa de la entidad, alrededor de 3 millones 450 mil personas, sólo 62 mil están desocupadas.
En un año, el porcentaje de desocupación en Veracruz pasó de 3.3 a 1.8 por ciento.
El problema es que para efectos de la estadística, la fuente oficial define como persona desocupada a quien no haya laborado ni siquiera un día a la semana; es decir, si una persona trabaja sólo en ese periodo, sin importar su ingreso, se le considera en subocupación, no desempleada. De ese modo sale un porcentaje bajísimo de personas sin empleo.
La realidad, sin embargo, es diferente; y ello se refleja en los niveles de la informalidad laboral y, sobre todo, de la pobreza en la entidad: datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, Coneval, indican que la pobreza supera el 58 por ciento, en tanto que la pobreza extrema está cerca del 14 por ciento.
Además, 1 de cada 5 veracruzanos es vulnerable por carencias sociales; y sólo 14 de cada 100 no son pobres ni enfrentan condiciones de vulnerabilidad.
Al final, lo destacable es que aunque sea a paso lento, la economía veracruzana comienza a caminar; no al ritmo deseable, pero al menos no se reporta pérdida de empleos, ni mayores niveles de rezago; de hecho, de acuerdo con el informe de la Sedesol estatal, en los años recientes casi 600 mil veracruzanos superaron el rezago en calidad, espacios y servicios básicos de vivienda, lo cual es un avance importante.
@luisromero85