Buen día, apreciado lector. Entre tanto problema que tenemos en México y de los que nos enteramos a diario por todas partes, no cabe duda que uno que crece y atormenta cotidianamente a la sociedad mexicana y veracruzana está el de la migración.
Los que vivimos por el sur de nuestra entidad hace tiempo que por ranchos y casas, entre monte y veredas vemos pasar y pasar familias enteras de extranjeros que suplican apoyo, discreción, comida y lo que se pueda para llevar.
Por eso en verdad es urgente que en México se implante una política de acogida e integración social, económica y cultural, que responda a los desafíos del nuevo fenómeno migratorio que se enfrenta, debido a la cercanía con Estados Unidos.
Los que saben de esto opinan que se debe basar en un marco normativo institucional adecuado para la conformación de estrategias de atención inmediata, que satisfaga las necesidades urgentes como el acceso a la salud, alojamiento y la asistencia legal.
El objetivo ya no es tan solo atender las necesidades de personas en situación de movilidad, sino transformar esos retos de la movilidad en oportunidades para el desarrollo.
Me comentan que en Xalapa el gobierno estatal ya atiende el problema con la Dirección General de Atención a Migrantes, a cargo de Carlos Enrique Escalante Igual, hombre con fama de serio y responsable, que hace su labor de manera callada, pero se ejercita diariamente en esa institución, instrumentando programas y proyectos en pro del migrante, contando para cumplir tal encomienda con el invaluable apoyo del subsecretario de Gobierno, Carlos Alberto Juárez Gil.
Me informan que todos los trámites y servicios que ofrece la Dirección de Atención al Migrante son totalmente gratuitos, incluída la incorporación al Programa de Reunificación Familiar, que busca promover la unión familiar e impulsar acciones en favor de los adultos mayores de sesenta años, oriundos o vecinos del estado, que tengan hijos o familiares viviendo en EU, sin importar su situación migratoria, que se practica mediante el otorgamiento de visas temporales B1 o B2, para encontrarse con sus familiares. Buen punto para el gobierno de don Cuitláhuac, porque cumple con las mínimas reglas de nobleza y humanidad al proporcionar al migrante extranjero en situación de vulnerabilidad, los servicios de orientación, gestoría y asistencia, a fin de realizar su trámite administrativo migratorio ante el Instituto Nacional de Migración.
Me dicen que el titular del Ejecutivo ha tenido buen tino con la designación en esa área de un hombre de mucha calidad y calidez humana como Carlos Enrique Escalante.
Igual. Bien hecho.
