En este post les platicaré –y estoy segura de queserá de su interés— cómo afecta el cigarro y el humo a tu piel. Cada vez que fumas te llevas numerosas fibras de colágeno,que difícilmente recuperarás, además de que se te marcarándemasiado “el código de barras”, como se les conoce a laslíneas de expresión que se marcan en el labio inferior. El humodel tabaco afecta negativamente a la piel de dos formas: el airecontaminado con humo seca la piel y fumar reduce la cantidad deflujo sanguíneo que llega a ésta, lo que la priva de oxígeno yotros nutrientes esenciales y provoca deshidratación en lasuperficie cutánea.
La piel de la mujer se ve más afectada por el tabaco que la delhombre debido a su delicadeza. La nicotina eleva los niveles devasopresina, hormona que estimula la contracción de las fibrasmusculares, aumenta la presión sanguínea y disminuye losestrógenos en mujeres, favoreciendo la aparición de sequedad yatrofia cutánea, además de la posibilidad del crecimiento devello. El consumo de tabaco reduce el flujo sanguíneo que llega ala piel, lo que se traduce en una falta de oxigenación de lascélulas y nutrientes de los tejidos.
Una terapia antienvejecimiento para atacar los anterioressíntomas, se realiza con ozono, el cual tiene un efectoantioxidante basado en la regulación de la formación de radicaleslibres y del estrés oxidativo. Además, es muy útil para mejorarla circulación sanguínea ya que produce una vasodilatación y unadisminución de la viscosidad de la sangre.
El ozono al ser aplicado directamente sobre áreas afectadas lassana y además reafirma la piel, regenerando las célulasdermales afectadas por la nicotina y relaja las líneas deexpresión al tiempo en que va desintoxicando a la persona. Parasaber más llame a los teléfonos 812 66 63 y 813 83 80.
*Colaboradora