Las enfermedades físicas y crónicas —cáncer principalmente— son consecuencia del exceso de ácido.

Y sobre todo al estresar el equilibrio del Ph del cuerpo, llegando a producir los síntomas que conocemos como enfermedades. El cuerpo no puede soportar por mucho tiempo permanecer en un estado ácido. La acidificación se presenta en nuestro cuerpo en siete fases que son pérdida de energía, sensibilidad e irritación, mocos y congestión, inflamación, endurecimiento de tejidos blandos —induración, incluyendo lupus, , fibromialgia, endurecimiento de las arterias—, ulceración y degeneración —cáncer, enfermedades coronarias, infarto, SIDA, esclerosis múltiple, diabetes—.

El agua activa Detiene la formación de radicales libres, elimina las toxinas de las células, previene las enfermedades y retrasa el proceso de envejecimiento, además proporciona minerales esenciales, promueve el flujo adecuado de la sangre y mantiene su pH en valores normales. El agua alcalina es mejor para hidratar el cuerpo debido a que penetra las células de forma más efectiva. El agua activa prolonga la salud y la vida. Lucha contra la formación de cálculos renales y biliares. Evita la osteoporosis. Ayuda a limpiar y purificar el cuerpo.

Entre los beneficios que aporta el agua alcalinizante están el ajustar el pH de la sangre a 7.45, aumentando su fluidez (reduce la viscosidad) de la sangre; acelerar la hidratación de los tejidos, permitir a la hemoglobina una eficiente absorción de oxígeno; entregar nutrientes de forma acelerada a las células para un mejor funcionamiento; recoger eficientemente los desperdicios, producto del intercambio bioquímico. El agua alcalina es catalogada como la mejor agua recomendada para el consumo humano por su gran poder vitalizante y antioxidante. Hoy te sugiero beber medio litro de agua alcalinizante durante un mes y notarás de inmediato los beneficios. No olvides ingerir un vaso en ayunas y otro después de cenar. Para saber más sobre este tema llame a los teléfonos 812 66 63 y 813 83 30.