El aislamiento beneficiará a las artes plásticas, sostiene la artista plástica veracruzana Gabriela Peralta, quien considera que la pandemia hace que los artistas trabajen su consciente e inconsciente. La vida es efímera, pero los trazos quedarán, asienta.
Para el arte, la pandemia se verá como una experiencia rica, pues surgirán muchos caminos, nuevas líneas. La pandemia para esta artista será un parteaguas, un antes y después, ya que le enfrenta a crear obra pensada en la necesidad de la coexistencia.
En su caso, por primera vez está trabajando sin prisas, lo que le da un sentimiento de libertad, no de aislamiento.
La serie Habitáculos, que actualmente trabaja la artista nacida en Poza Rica, le viene ad hoc con el aislamiento por el que está pasando debido al Covid-19, y es que ésta tiene que ver con el desarrollo de espacios de acuerdo a los seres humanos. Habla del contacto con el espacio que uno habita que es vital, sin embargo el encierro vino a darle otro sentido y lo ha trabajado desde el espacio interno.
La serie, surgida del enfrentamiento que ha tenido que hacer con sus propios demonios, de tocar fondo y de ahondar en las relaciones interespaciales, le ha permitido interiorizar y enfrentarse con las limitantes de los espacios. Ésta será presentada en exposición virtual de los Talleres Libres de Arte de Coatepec y después se presentará en el Estado de México.
A Gabriela Peralta le gusta el realismo mágico, las sirenas, hadas, criaturas mitológicas inventadas. Le fascina entrar a través de su pintura a otros mundos e historias, sin embargo en los últimos años había estado trabajando por encargo y para terceros, había dejado de lado la experimentación, pues estaba a la complacencia del cliente y su trabajo se volvió un tanto de maquila. Hoy, que el aislamiento le permitió nuevamente la experimentación, el conflicto es consigo misma pues ya no hay un tercero, sin embargo se siente satisfecha con los resultados, el ritmo, la armonía y la distancia que debemos tener para no invadir los espacios del otro.
A pesar de que al principio de la contingencia se enojó mucho por no poder continuar con su trabajo normal en las aulas de los Talleres Libres de Arte en Coatepec, hoy cree que el arte se enriquecerá con nuevos caminos y líneas.