Abraham Méndez, quien en Xalapa ha construido una carrera en el área del diseño gráfico con reconocimiento internacional, sale del color explosivo característico de su obra y presenta “Poética Monocromática”, reflejo de una faceta donde solo existen el blanco y el negro; el positivo y el negativo.
En la Galería Fernando Vilchis del Instituto de Artes Plásticas de la Universidad Veracruzana (IAP-UV), el artista muestra 30 piezas de gráfica digital y un espacio intervenido con trazos caligráficos.
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Emocionado por el reto que le significa apropiarse de las paredes, dice estar en una nueva etapa, como creador pero también como persona, pues la pandemia y pospandemia por Covid-19 lo han llevado a otras exploraciones.
¿Caligrafiti? La respuesta es sí. Aborda el estilo que en la última década ha tenido un empuje en quienes interesados en la caligrafía y el arte urbano hacen la fusión y la llevan a los muros. Ahondar en la caligráfica antigua y enmarcarla en la época contemporánea y el arte urbano no solo es espectacular sino un encuentro con su escritura favorita, la gótica, expresa el creador en entrevista.
¿Qué es para el artista la caligrafía?
“Empecé a estudiar caligrafía en formatos mucho más pequeño pero había querido hacer una intervención, porque si algo tiene la caligrafía es que siempre busca la belleza, dar un aporte estético donde quiera que se plasme”.
El artista, docente e investigador del IAP-UV, explica que en conjunto “Poética Monocromática” tiene que ver con la idea de que a partir de imágenes y textos se pueden construir un sinfín de discursos.
Mucho de su trabajo de cartel, menciona, ha sido siempre una explosión de color, un elemento más dentro de su obra, pero ahora sale de su confort, empieza con blanco y negro, a través del collage digital.
“Me doy cuenta que el blanco y negro son también muy expresivos y que la forma cobra vida y se manifiesta de otra manera cuando hay ausencia del color”, comparte.
“El color es un elemento muy fuerte en el arte, en el diseño, pero cuando no está, la forma adquiere mucho más fuerza y empieza el descubrimiento de nuevas texturas y planos, nuevas formas encontradas a través del positivo y negativo”, opina.
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Quien ha tenido presencia en exposiciones y bienales de prestigio, dice estar en búsqueda de nuevos lenguajes, donde el collage y el blanco y negro le hacen sentirse cómodo, con mucha fluidez y el ánimo y entusiasmo por seguir comprobando la capacidad del ser humano para adaptarse y asumir desafíos.
El maestro en diseño tipográfico tiene entre sus pasiones entender la forma y la estructura de las letras, así como saber de dónde vienen.
En su infancia, recuerda haber estado cercano a la imprenta familiar, a la tinta, el papel y las letras. El entorno no ha cambiado mucho pero sí las exploraciones en lenguajes y estilos escriturales antiguos, las letras góticas, las letras cancillerescas…, algo tienen los ángulos y las formas que, acepta, lo atrapan y lo mantienen con el interés por seguir experimentando.
“Una de mis búsquedas es encontrar nuevos trazos, nuevos ángulos, nuevas formas en las letras. Este interés es mío pero también de muchas personas. Después de estar dormido un poco, el gusto por la caligrafía va al alza”.
Abraham Méndez invita a conocer su Poética en avenida Primero número 21, colonia Obrero Campesina. La entrada es libre. Otro llamado es a las instituciones, a no olvidar al arte, a los artistas y a los estudiantes de arte pues, sostiene, el arte es parte fundamental en la sociedad.
