Una de las mentes más preclaras que ha dado el estado de Veracruz es, sin duda, la de Jorge cuesta. Inteligencia voraz y feroz, nada le fue ajeno. Hombre de muchos atributos, poeta altísimo y a ratos hermético, químico de formación e iluminado por toque poético, Jorge Cuesta formó parte de la generación Contemporáneos, aquella generación que revitalizó las letras de la primera mitad del siglo XX.
Gracias al Instituto Veracruzano de la Cultura tenemos ahora en nuestras manos este volumen que forma parte de la Colección Veracruz Universal, coordinada por el poeta José Luis Rivas, otro de los grandes poetas de nuestro estado y quien, de no ser el coordinador, merecería él mismo un tomo dentro de esta colección.
El libro tiene sus casi quinientas páginas y no es una simple antología, contiene, claro, textos de Cuesta que van de sus poemas a sus ensayos, de sus traducciones a su crítica de arte; aunado a eso el lector se encontrará con una “Nota preliminar” firmada por el autor de la antología, Víctor Peláez Cuesta, un “Prólogo” de Adolfo Castañón, sin duda uno de los lectores más conspicuos del Cordobés, “Testimonios” de amigos de Jorge Cuesta como Gilberto Owen, Xavier Villaurrutia, grandes lectores de él como Octavio Paz, Carlos Monsiváis, Inés Arredondo, Francisco Segovia, Christopher Domínguez Michael, y grandes estudiosos de su obra como Miguel Capistrán. Y por si esto no bastara a tan espléndido volumen, éste se cierra con una bibliografía y una iconografía que da muestra de la vida y la época del autor de la Antología de la poesía mexicana moderna.
Alrededor de la vida de Cuesta se tejieron mitos y realidades acerca de su locura, sobre sus fórmulas alquímicas y secretas, sobre su vida amorosa, sobre su emasculación. Muchos investigadores, lectores y curiosos emprendieron el periplo hacia el Ingenio de Potrero, hacia Córdoba, a la casa de sus padres, a entrevistar a sus familiares, a conocer a sus amigos y parientes, a hurgar en su biblioteca, ¿por qué?, porque Jorge Cuesta, su obra, fue, en palabras de Octavio Paz “una de las inteligencias más penetrantes que ha tenido México”.
“Yo le debo muchísimo”, dijo también nuestro premio Nobel. Todo aquel que se acerque a este libro no podrá decir otras palabras. Para el lector nuevo en Jorge Cuesta le queda la maravilla del descubrimiento; le queda la sorpresa de la primera visión del mar, el primer respiro, la ansiedad por la siguiente página, la zozobra y el desasosiego.
Jorge Cuesta: entre poesía y crítica de Víctor Peláez Cuesta no es una antología, no es una introducción a un autor, es la puerta a toda una generación: los Contemporáneos; a una literatura: la mexicana: a una visión del mundo: la nuestra, la del hombre crítico, agudo, que piensa en voz alta y con la pluma en la mano.