Este 30 de noviembre se conmemoraron 138 años de la fundación de la Benemérita Escuela Normal Veracruzana “Enrique C. Rébsamen”, una institución emblemática que ha marcado la historia del normalismo en México por su impacto en la formación docente y su influencia en la educación nacional desde 1886.
Historia de la Benemérita Escuela Normal Veracruzana “Enrique C. Rébsamen”
Inaugurada el 30 de noviembre de 1886, la Escuela Normal Veracruzana sentó las bases del sistema de formación docente en México. Inspirada en los avances pedagógicos de finales del siglo XIX, la institución fue pionera en implementar un modelo educativo científico y liberal, bajo la dirección de Enrique C. Rébsamen, pedagogo suizo cuya visión revolucionó la enseñanza en el país.
Figuras destacadas
A través de figuras clave como Carlos A. Carrillo, Manuel R. Gutiérrez, Cassiano Conzatti, Rafael Montiel, entre otros, esta escuela consolidó su papel como núcleo de una reforma educativa que promovía una educación científica, liberal e inclusiva. En 1889, Genoveva Cortés se convirtió en la primera mujer admitida, marcando un hito en la inclusión educativa.
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El 22 de diciembre de 1886, la escuela inició su primer curso formal, en un acto presidido por el gobernador Juan Enríquez.
Enrique C. Rébsamen y Carlos A. Carrillo, principales impulsores del proyecto, destacaron en sus discursos la importancia de esta institución para el desarrollo del país.
La orientación liberal de la escuela enfrentó resistencias de grupos conservadores, que intentaron sin éxito destituir a Rébsamen como director. Sin embargo, el firme respaldo del gobernador y la comunidad educativa permitió que la institución continuara iluminando el panorama educativo en México.
Participación en movilizaciones sociales
La Normal Veracruzana ha desempeñado un papel destacado en los movimientos sociales y educativos a lo largo de su historia.
Durante el periodo revolucionario, sus estudiantes y egresados se unieron a luchas por reformas sociales y educativas. En décadas posteriores, la institución fue un bastión del magisterio democrático, abogando por la educación pública, gratuita e inclusiva.
Entre las décadas de 1960 y 1970, los normalistas participaron en movimientos estudiantiles que exigían autonomía para las escuelas normales y reformas al sistema educativo. Estas movilizaciones reflejaban un contexto de efervescencia social en México, donde los estudiantes buscaban justicia y cambios estructurales.
En 2013, tres mil maestros de la Normal se unieron a manifestaciones contra la Reforma Educativa, respaldando a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE). Estas protestas rechazaban políticas gubernamentales percibidas como perjudiciales para el magisterio.
La institución también ha mostrado su compromiso con causas más amplias. En 2014, estudiantes de la Normal Veracruzana protestaron en Xalapa exigiendo justicia por los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos. Además, se ha manifestado en contra de la criminalización de la protesta social y el uso de la fuerza contra movimientos pacíficos.
A lo largo de 138 años, la Benemérita Escuela Normal Veracruzana “Enrique C. Rébsamen” ha sido más que un centro educativo; ha sido un motor de transformación social y un defensor de los derechos humanos y la justicia social. Su legado sigue vivo en cada generación de docentes que egresa con el compromiso de construir un estado y país más justo y educado.
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