Xalapa, Ver.- Como un honor y un privilegio describen las violinistas veracruzanas Mireille López Guzmán y Perla Fernández López la invitación a tocar por segunda vez en uno de los recintos más importantes del mundo para los músicos clásicos: el Carnegie Hall de Nueva York.
En entrevista, además de hablar de su alegría y el reconocimiento que significa para su trabajo, comparten que rendirán homenaje póstumo a la vida y obra del compositor griego Dinos Constantinides, el próximo 10 de octubre.
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Ambas artistas compartirán escenario con al menos ocho músicos de otras naciones. Como representantes de México, afirman, es una responsabilidad, un orgullo y un compromiso por dar lo mejor de sí mismas.
Coinciden en sentirse honradas por poder interpretar la música de quien fuera compositor y violinista. Fallecido en 2021, a Constantinides las veracruzanas tuvieron la oportunidad de conocerlo y aprender de él. Consideran que se ganó un lugar importante en la historia de la música contemporánea.
Destacan además su calidad humana, el interés por apoyar a los demás intérpretes y compositores, así como su búsqueda por enseñar a trabajar en equipo.
“Fue un hombre afable que hizo suyo el papel de sembrador de semillas y también de mecenas; debe ser recordado y su música interpretada. Es música moderna, bien escrita y fácil de escuchar porque tiene elementos folclóricos que permiten una conexión con cualquier público”.
Trayectorias
Mireille López Guzmán, quien nació en Orizaba pero radica en Xalapa, enfatiza que pocos mexicanos han tocado en Carnegie Hall, lo cual la motiva y le hace saber que está en el camino correcto.
Al lado de la xalapeña Perla, conforman el dueto Fernández López y Guzmán, el cual acumula una década de trabajo conjunto con presentaciones en distintos recintos y en Estados Unidos. Actualmente son un grupo de cámara estable.
¿Pero qué las hace ser merecedoras de llegar a la prestigiosa sala de conciertos, de la que se habla de su belleza, historia y extraordinaria acústica? Además del dúo, de manera individual cuentan con amplias trayectorias.
Mireille empezó a tocar el violín a los siete años y estudió profesionalmente en la Facultad de Música de la Universidad Veracruzana. Desde 2006 forma parte de la Orquesta Sinfónica de Xalapa.
La maestra en Educación Humanista es catedrática en el Instituto Superior de Música del Estado de Veracruz y ha participado en festivales nacionales e internacionales.
Para ella es fundamental enseñar la música de una manera enfocada, exigente y disciplinada pero humana, sin malos tratos.
En el caso de Perla Fernández, es nativa de Xalapa, toca violín y viola. Obtuvo su doctorado en la Universidad Estatal de Luisiana. Ha sido miembro de la OSX y de orquestas de Sonora y Sinaloa.
Como docente se ha desempeñado en el ISMEV, Facultad de Música-UV y actualmente es profesora de la licenciatura en Música de la Universidad de las Américas Puebla y directora académica del departamento de Artes.
Las veracruzanas manifiestan que el arte es formativo, disciplina, trabajo en equipo; sí entretenimiento pero también alimento para el espíritu.
