El Instituto Nacional de Antropología e Historia destaca como uno de los atractivos de este semestre la exposición dedicada a Leopoldo Batres inaugurada en la Sala de Exposiciones Temporales del Museo de Antropología de Xalapa.
Abierta al público general sin costo, “Andanzas y reflexiones, Leopoldo Batres (1852-1926)”, es el recuento de la vida de uno de los pioneros de la arqueología mexicana moderna, quien es delineado en la exposición como un personaje multifacético.
Con la precisión de que la muestra no es inédita sino itinerante desde 1999, en la visita se logra saber que la curadora es Elvira Pruneda Gallegos, bisnieta del personaje e interesada en reivindicar la labor de su antepasado.
La muestra de fotografías y documentos que la familia Pruneda Batres ha conservado por casi cien años da oportunidad de saber más de quien a muy corta edad fue designado celador y escribiente en la aduana de Sontecomapan, Veracruz.
De acuerdo con lo mencionado en la exposición, ese nombramiento fue el que marcó un parteaguas en su vida para luego recorrer como militar el país, al mismo tiempo que se desarrollaba como coleccionista de vestigios.
Su interés por las antiguas civilizaciones lo llevaron después a realizar estudios de arqueología y antropología en Francia; en México fue nombrado inspector y conservador de monumentos.
A través de fotos, planos, dibujos, artículos personales y recortes de notas periodísticas es como se puede saber su trayectoria en esta ciencia, así como su relación y trabajo en el estado de Veracruz.
Según lo expuesto, además de celador y escribiente en la aduana de Sontecomapan, ya como arqueólogo y explorador, de 1904 a 1911 recorrió Orizaba, Maltrata, Tlalixcoyan, El Tajín, Nopiloa, Dicha Tuerta e Isla de Sacrificios, entre otros sitios.
“A sus 59 años, pasadas las fiestas del Centenario de la Independencia y un año antes de que fuera despedido como inspector y conservador de los Monumentos Arqueológicos de la República Mexicana, volvió a tierras veracruzanas”, anota el INAH.
Leopoldo Batres fue quien describió las conocidas “caritas sonrientes” como “figuritas en actitud de reír” y está documentado que en varios borradores analiza como antropólogo ‘La Anatomía y Fisiología de la Expresión’”.
Además de esta muestra, dentro del MAX se encuentran algunos de sus hallazgos que son parte de la colección permanente.
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Llamado por su bisnieta como el “arqueólogo del Porfiriato”, entre los hallazgos que se pueden ver en Xalapa está la escultura del jaguar agazapado, encontrada en Tierra Blanca y hoy a la vista del público en la pérgola 2.
El director del MAX, Alfredo Delgado Calderón, explica que esta pieza fue trasladada al MAX en 1986 y en un lamentable accidente falleció una persona durante su montaje, “también se le conocía como ‘la piedra del diablo’”.
Estudiosos del área consideran a Batres un pionero de la arqueología del estado y del país a quien es importante conocer, ahora mediante documentos y objetos.
Fecha y horario de visita
“Andanzas y reflexiones, Leopoldo Batres (1852-1926)”, se puede visitar de martes a domingo, de 9 a 17 horas, hasta el 5 de junio. La entrada es libre de costo. También hay recordatorio que para ingresar al MAX a conocer la colección permanente sí hay una cuota de martes a sábado; el domingo es gratis.
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