Arriesgar sus vidas en las zonas de mayor peligro de nuestro país, abandonar su hogar y familia para buscar historias que contar o sufrir discriminación por el simple hecho de ser mujeres, son sólo algunos de los retos a los que las fotoperiodistas se enfrentan diariamente en México.
Es por eso que en el marco del Día de la Mujer se inauguró Exposición Fotográfica de Mujeres Fotoperiodistas: LA mirada, LA cámara, LA luz, LA fotografía, Desde nosotras en la Galería Abierta de las Rejas de Chapultepec.
“Nunca había habido una exposición tan grande, somos 59 mujeres las que vamos a exponer nuestro trabajo de fotoperiodismo, desde la primera que es Lilia Hernández, que trabajó en El Sol de México y que fue la pionera, hasta ahora las nuevas generaciones”, cuenta Laura Lovera, fotógrafa que por más de 25 años ha formado parte de Organización Editorial Mexicana y ahora también de esta exposición con una imagen que retrata la protesta de los periodistas mexicanos.
“En la fotografía que presento, el reportero Álvaro Delgado se manifestó durante un evento de Enrique Peña Nieto en protesta por los periodistas caídos. El ambiente era ríspido porque venía manifestándose en otros eventos. Ese día se paró y sacó la manta gritando ‘Ya basta’; los del Estado Mayor corrieron y quisieron jalarle la manta”, cuenta sobre esta imagen capturada en junio de 2017 y que para ella “representa algo en cuanto a nota periodística”.
La exposición también muestra historias de la vida cotidiana, pero que a su vez también reflejan las dificultades de una mujer fotoperiodista pero la necesidad de contar historias. Gretta Hernández cuenta con más de 20 años de trayectoria. Para iniciarse, tuvo que mudarse a Zacatecas, donde realizó la cobertura de la campaña de Gobernador de Ricardo Monreal. Su trabajo tuvo que detenerse momentáneamente para ser madre, lo que la llevó a retratar otras imágenes.
“Pero la necesidad de contar historias siempre es más grande. Tenía ganas de salir y hacer un reportaje, así es que empecé a contar lo que estaba cerca de mí y comencé a hacer historias de mis vecinos. Una de ellas tiene un hijo que es tetrapléjico, así es que le pedí que me dejara hacer un retrato de familia y salió el tema de que ella lo llevaba a sesiones de hidroterapia”, cuenta Hernández, quien en esta fotografía tomada en 2008 retrata el esfuerzo y la dedicación de una madre de familia.}
Esta muestra fotográfica también abre espacio a historias más crudas, como es la de Lucía Flores, quien un 2 de noviembre en el Ángel de la Independencia toma una fotografía donde “papás, mamás, amigos de mujeres asesinadas se reúnen para poner cruces rosas con el nombre de las chicas, como una manera de recordarlas”, explica. Con una trayectoria de apenas seis años, Flores explica que escoger esta imagen para esta exposición “tuvo mucho sentido, pues es en el marco de un festival de mujeres periodistas, que para nosotras es más difícil trabajar porque somos muy pocas en realidad. Así es que consideré que era bueno presentar esa foto porque era también una manera de recordar lo difícil que es ser mujer en México”, dice.
Y es que las tres fotoperiodistas coinciden en este punto: ser fotoperiodista es difícil, pero ser mujer fotoperiodista lo es más. “Los compañeros fotógrafos ya son fotoperiodistas por el simple hecho de llegar, incluso antes de hacer sus fotos. Pero tú como mujer te vuelves una hasta que ganas el respeto de ellos con tu trabajo y constancia y temas que proponer”, destaca Lucía Flores.
A lo largo de su carrera, Gretta Hernández ha sufrido “discriminación, rechazos, acoso… Pero aprendes que así es, que debes plantarte con los dos pies, gritar más fuerte y esforzarte más”.
“hace 26 años había muchos hombres y compañeros machistas. Ha sido muy difícil como mujer, hubo hostigamiento a mi persona y otras cosas", comentó Lovera.