La cebolla, aliada de los dolientes

Con El Bodegón de las Cebollas, actores llegan a los Centros de Gestión Comunitaria de Xalapa para compartir historias y propiciar la participación activa de los espectadores

MARIBEL SÁNCHEZ|Diario de Xalapa

  · jueves 19 de septiembre de 2019

Foto: Cortesía

Mientras en la esquina de una cocina una joven mujer toca la guitarra, al fuego está la gran olla de sopa de cebolla, que emana una sinfonía de olores de orégano y laurel. Al centro están la mesa de madera y no, no hay sillas, hay bancas donde caben 20 personas, o 25, pero apretaditas, algo que no importa demasiado, porque allí, en ese espacio, lo realmente trascendente es la convivencia, congregarse para escuchar al otro, para ser empáticos, para llorar por picar la cebolla en una tablita o llorar por las historias como sanación del alma.

El Bodegón de las Cebollas, propuesta de Tres Colectivo Escénico y Área 51, con dirección de Paty Estrada, tuvo su estreno en Xalapa este mes patrio y actualmente realiza una gira sui géneris por las colonias de la periferia de la ciudad, los Centros de Gestión Comunitaria, allí donde apenas hace dos años difícilmente llegaban las manifestaciones artísticas.

Con adolescentes de telesecundaria o con quienes han padecido más los golpes de la pobreza, un grupo de actores se reúnen para hablar de tú a tú, para arrebatarle a la cotidianidad unos minutos para ser más humanos, para recordar a quienes un día se fueron y no volvieron, para rememorar aquello que lastima, que punza, que hiere, pero también para reír, para abrazar, para conocer una historia de amor.

El Bodegón de las Cebollas no es una obra de teatro, es un convivio escénico que no se da si no hay quien esté dispuesto a escuchar o, por lo menos, dejarse consentir con una sopita caliente, con café o una “cañita” de Mahuixtlán.

Con la luz emanada de los quinqués y las emociones expuestas, este bodegón resulta un homenaje a la vida misma, a las historias que han marcado a miles de mexicanos; es pasado pero también presente. Las fronteras espacio-temporales se diluyen para escuchar decir que al bodegón se llega a llorar, discretamente o sin reserva, porque allí corren las lágrimas y lavan todo. Llueve, cae el rocío. Las represas se abren y los diques, los diques también se abren en caso de inundación…

El Bodegón de las Cebollas es una adaptación libre que Paty Estrada y David Alejandro Colorado hicieron al capítulo homónimo que forma parte de El tambor de hojalata, novela del Premio Nobel de Literatura alemán Günter Grass, quien creó un negocio adonde acudían las personas con buena posición económica para cortar cebolla y llorar, abandonándose al sentimiento en grupo donde todos gemían por los dolores que era imposible expresar en el mundo normal.

El bodegón en su versión mexicana cuenta con la dirección de Paty Estrada, quien también actúa al lado de Santiago Dorantes Meseguer, Leticia Valenzuela, Iván Ontiveros y Tayde Pedraza. La iluminación es de Eglantina González y asistencia de Karina Eguía, quienes llegarán este mes a los CGC Norte, El Tronconal, El Naranjal, Plan deAyala, Casa Blanca, Reforma y El Olmo, en una colaboración con Diego Salas, encargado de la Subdirección de Cultura local.