Xalapa, Ver.- Desde finales del siglo XX y hasta la actualidad va en aumento el número de artistas interesados en ver el arte como un medio de denuncia social e incluso hay quienes enuncian y exponen los errores del sistema. Georgina Quintana no está interesada en ello, sin embargo, declara en entrevista, "también hablamos de denuncia cuando alguien plasma en su trabajo la belleza de la vida, porque es necesario hacer ver que cada vez son menos quienes se detienen a observar que entre todo lo malo, también hay mucho que admirar y celebrar". Ella es del grupo de estos últimos creadores.
De visita en Xalapa, con motivo de la inauguración de Biblioteca de la prehistoria, exposición que permanece a la vista del público en Flavia, Galería, la reconocida artista visual dijo en entrevista para Diario de Xalapa que no siente que en la denuncia de lo cruel, la maldad o lo inhumano esté su papel.
“Es más bien compartir mi fascinación, mi asombro. Quiero decirle a todos: '¡Miren qué bello está esto! ¡Vean también para acá!'. Yo quiero invitar a mirar distinto. No sé si se pueda considerar así, pero mi denuncia es una invitación a darse tiempo para un respiro, para llenarse de energía, para tener empatía con lo que existe, para respetar y querer, para hacer cosas que despierten el gusto por la vida y el respeto por el otro humano, por la planta, por los animales, por lo que nos rodea”.
Georgina, quien cuenta con una formación interdisciplinaria realizada en distintos países que abarca la literatura, las artes visuales y las filosofías orientales, rememoró que desde niña le interesaron los animales, la naturaleza y disfrutar las manifestaciones artísticas.
“Tuve un cuñado que fue artista y llegó a la casa cuando yo era muy chiquita; siento que de cierta manera me influenció, aunque fue determinante la presencia de mi papá. Él era abogado, pero tenía una pasión por el arte colonial, el arte prehispánico… tenía colecciones de piedras, de libros, de objetos muy lindos.
Me llevó a conocer a Chucho Reyes, a varios artistas y escritores, y claramente me doy cuenta que desde muy niña lo que me gusta ver es lo bello, cultivarme y hacer solo aquello que me hace estar viva. Me es indispensable mirar lo bello”.
TIEMPO…
Con esta filosofía de vida y la idea de no siempre ver lo que está, sino lo que le dé la gana ver, Georgina Quintana ha desarrollado una propuesta creativa donde están presentes el dibujo, la pintura, los retratos y, más recientemente, el grabado. Los temas son recurrentes: el tiempo, el orden del universo, la flora y la fauna, la arquitectura, la vida urbana, la ciencia y la filosofía.
Biblioteca de la prehistoria, con curaduría de Graciela Kartofel, da cuenta de sus más recientes afectos al grabado en linóleo, el cual, a pesar de que ya había explorado en los inicios de su carrera profesional, no tiene más de un año que la ha mantenido absorta, “con una sensación de paz y al mismo tiempo de ir tras lo lúdico”.
Con reconocimientos que avalan su labor artística, exposiciones en México y en el extranjero y haber sido seleccionada en dos ocasiones como Miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte, Georgina Quintana es una mujer cuyo trabajo es recomendable conocer.
En Jiménez número 42, zona Centro de la ciudad, hay oportunidad de hacerlo, y sin ningún costo. Quien asista a la galería encontrará gráfica contemporánea, una especie de relato que invita a reflexionar en torno al presente y el pasado, a maravillarse con grandes edificios y a reír por la manera en la que a esas modernas construcciones ingresan los animales que más sorpresa causan, los dinosaurios.