Con cerca de 200 años de historia, el Patio Muñoz se mantiene como un atractivo turístico en Xalapa, un sitio donde los habitantes afirman ser una sola familia y tener entre sus compromisos salvaguardar las tradiciones y costumbres.
A solo unos días del arranque de las posadas, ya están colocados el pesebre, los adornos navideños y las piñatas de colores para celebrar, convivir y generar comunidad.
¿Cuándo comenzarán las posadas?
En 2023, el inicio de las posadas será el 16 de diciembre en colaboración con la parroquia de San José, de donde a las 18 horas saldrán los peregrinos con rumbo a Pino Suárez número 38.
“Esperaremos a todos con ponche calientito”, dice Leticia Herrera Pereyra, quien tiene 61 años de vivir en el colorido patio de vecindad, de donde destacan el conjunto de lavaderos centrales, nueve talleres y 14 viviendas, cuyas ventanas simulan ser un par de ojos vigilantes.
“Mi abuela Herminia Pereyra nació aquí mismo, en el patio, igual que mi mamá, Teresa. Los Pereyra éramos quince viviendo en un solo cuarto; ahora solo soy yo con mi esposo y mis dos hijos”, dice la orgullosa mujer.
Fuera de su casita, de donde penden banderines triangulares multicolores, escarchas y Nochebuenas, manifiesta ser privilegiada por habitar ese lugar, donde las fiestas patrias, Día de Muertos y festividades decembrinas son abiertas a todas las personas.
Las posadas son especiales. Recuerdan la esencia del patio, que son el fomento del arte, la artesanía, la reunión para despertar la imaginación y la creatividad, dice Maribel Juan Ruiz, artesana que en los primeros días de noviembre empezó el taller de elaboración de piñatas.
Una de las características de este lugar son sus talleres, entre ellos el de Gladis Mondragón; ella trabaja cartonería y papel maché. Al menos durante 40 años ha hecho de su cotidianidad el trabajo con engrudo, papel, alambre y colores.
Más recientemente destina tiempo a un vivero de plantas medicinales, que dan un toque alegre; hay flores y plantas, tanto las sembradas por ella como las que los vecinos tienen al frente de sus viviendas.
“No faltan las dificultades, como en toda familia, pero somos muy unidos, siempre dispuestos a ayudarnos los unos a los otros. Nos unimos para todo y nos tenemos aprecio”, dice con amplia sonrisa Leti Herrera.
Al oasis de tranquilidad, al cual se accede por un pasillo con pintura mural, todas las personas están convocadas. Las posadas del 17 al 23 serán a las 20 horas.
Quien asista debe saber que el Patio Muñoz es un patrimonio cultural. Inicialmente fue propiedad de los hijos del general Porfirio Muñoz Victoria; luego, la vecindad quedó en manos de un fideicomiso y fue restaurada en 1988.
El Patio Muñoz es una muestra de lo que eran los patios de vecindad que sobrevivieron más allá de la medianía del siglo XX.