El artista visual Daniel Teodoro Echeverría expone en Xalapa Habitar para no morir, Tomo I, su más reciente obra en la que el espacio y los vínculos con otros lenguajes artísticos se conjuntan para generar nuevas experiencias sensoriales.
Habitar para no morir será inaugurada a las 20 horas de este sábado en la galería de Obra negra, cuyas instalaciones están ubicadas en calle De la Rosa número 91, en la colonia Salud, sitio que, aunque no está tan alejado del centro histórico de la ciudad, sí brinda la oportunidad de acercar el arte a otros públicos.
Sobre la exposición, cuya base son 10 pinturas de arte abstracto en formato mediano, el artista explica: “Es tomo I porque es el inicio de una propuesta con la que busco renovar un poco los formatos de exposición, sin perder el sentido tradicional de la producción. Lo que hago es abrirme a otras posibilidades, para lo que me valgo un poco del teatro”
Lo que Daniel Teodoro resuelve es crear pequeños escenarios con la finalidad de que cada pieza tenga una ambientación diferente.
Detalla que las piezas son acrílicos y esmaltes sobre madera y trabaja algunas pastas y pátinas, pero la obra no está producida en caballete sino sobre el piso, y para su construcción no emplea pinceles, recurre a materiales que no son propios del arte: espátulas, escobas, yanas (herramienta de albañilería), clavos, lijadoras.
Expresa que ese proceso creativo sigue siendo tradicional pero ya tiene otra inercia relacionada con cómo será montada.
Con la idea de relacionarse y compartir con el “otro”, invita al público a acompañarlo esta noche en Obra negra, donde hará una pequeña demostración de cómo pinta y qué sucede cuando alguien está creando.
“Regularme el espectador ve la obra terminada y montada, pero hay un proceso tonal que, me parece, puede ser interesante para que vea cómo se crea en cuestión de sensaciones, tiempo y técnica.
Vivimos un tiempo de muchas posibilidades creativas y hay que valernos de todas las herramientas para crear y vincularnos con los espectadores”.