Presentan libro de la vida de santos

El material procede de una traducción que data del siglo XV, cuando Cristo era el máximo modelo inspirador en la vida de los santos

Jorge Vázquez Pacheco

  · sábado 20 de abril de 2019

Foto. Cortesía

Marcos Cortés Guadarrama, integrante en el Instituto de Investigaciones Lingüístico-Literarias de la Universidad Veracruzana, presentó recientemente Flos Sanctorum con sus etimologías. Lo maravilloso hagiográfico.

Al respecto, Sebastián Welke Laborde, alumno del académico, explicó que el volumen es un estudio y adaptación de relatos hagiográficos reunidos por el dominico Santiago de Vorágine, hagiógrafo dominico italiano (Jacopo da Varazze fue su nombre real), arzobispo de Génova que vivió durante el siglo XIII y que dio forma a uno de los más bellos trabajos enciclopédicos de aquel siglo.

“Se enfoca en elementos poéticos, teoría moral, medicina y en los pasajes donde se hace presente lo maravilloso. Esto último es muy importante porque se materializa en los milagros de los santos”.

En la presentación, María de los Ángeles Escobar Méndez elogió el rigor académico del compilador en la edición reciente con revisión ortográfica y nuevo formato, así como la atención que le mereció a ella misma la importancia de la literatura hagiográfica en la península ibérica y su impacto al ser introducida en la Colonia novohispana.

“Su lectura es recomendable no sólo para especialistas, también para todo público. Este Flos Sanctorum debería darse en un curso de literatura medieval.

La literatura hagiográfica llama la atención no porque se refiera a la vida de los santos, sino porque ello es conducido con lo fascinante de una buena narración”.

Cortés Guadarrama, doctor en Filología Hispánica, apuntó que el material seleccionado procede de una traducción que data del siglo XV y la figura de Cristo continúa como el máximo modelo inspirador en la vida de los santos mencionados. Así fue conducido hacia la imprenta, incluyendo la información contenida en incunables, la documentación en proceso artesanal y no impresa.

Aquellas viejas ediciones contienen grabados fascinantes y uno de ellos es nada menos que de Leandro de Sevilla, responsable de difundir el culto de la virgen de Guadalupe en Extremadura.