Veracruz, Ver.- Una construcción hecha de piedra café del siglo pasado que quedó atrapada entre la mancha urbana, llama la atención entre los vecinos, algunos señalan que se trata de una especie de fuerte en los tiempos de la guerra, otros que fue especie de cárcel y pocos son los que reconocen de su importancia durante la historia ferroviaria del país.
¿En qué zona de Veracruz se encuentra la estructura de la época ferroviaria?
La estructura se encuentra en el fraccionamiento Las Brisas al norte de la ciudad de Veracruz, actualmente está atrapada entre la mancha urbana muy cerca de la laguna de Lagartos.
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De acuerdo con el investigador, Héctor Haaz Saldaña, el edificio es un remanente de lo que fue la estructura ferroviaria de principios del siglo XX, para abastecer de agua a las locomotoras de vapor, que era parte de su activo principal para su funcionamiento.
Explica que este sistema de recarga era conocido como “la garza”, por la forma de la conexión de la tubería a la locomotora, que terminaba en punta.
“Ese edificio llevaba el agua hacia arriba y los depositaba en las locomotoras, sobre todo estaban instalados en zonas donde había abastecimiento natural de agua, actualmente es la zona de la laguna de Lagartos, antes esa laguna abarcaba un área más grande y llegaba hasta donde está el edificio”, dice
Detalla que estructuras como estás se colocaron en todo lo que era el recorrido del tren, que era la ruta conocida como la Interoceánico que iba a México vía Xalapa. “Aquí en Veracruz había dos ferrocarriles, dos vías, era la México vía Orizaba que era conocida como la del “Mexicano” y la México vía Xalapa que era la del Interoceánico”, refiere.
La ruta del Interoceánico partía desde la central en la avenida Montesinos hacía el lado norte, pasaba por donde actualmente se encuentra la estatua de Cuauhtémoc hasta la avenida Fidel Velázquez para incorporarse a lo que es la avenida Veracruz donde se encuentra “la garza”.
Comenta que se construyeron varias estructuras para el abastecimiento del agua de las locomotoras, ya que las primeras trabajaron a vapor y después fueron reemplazadas por la tecnología.
“El agua era el activo principal, había varias, una por la zona de Tejería, por lo que hoy conocemos como la gasolinera de los cocos en Miguel Alemán y Alcocer, otra por la laguna de Malibrán, estaban repartidas en zonas donde había agua para abastecer su funcionamiento”, indica.
Actualmente, la estructura luce muy deteriorada y algunas personas en situación de calle lo han tomado como vivienda temporal pese a los riesgos de contraer enfermedades por el nivel de humedad y que, además, hay animales silvestres que también buscan refugio.
"La piedra café, que era conocida como piedra peñuela, ya cumplió su ciclo de vida, hay deterioro, es una suerte que esté en pie, fueron fortificaciones hechas de manera industrial y que resistieron", puntualiza.