El paso del tiempo no ha sido motivo para que el espíritu inquieto y rebelde del veracruzano Manuel Zardaín se decante por buscar estadios donde impere la tranquilidad. A sus 65 años, en mayo de 2016, emprendió un viaje en motocicleta con rumbo a Estados Unidos que terminó en un aparatoso accidente; fracturas en brazos y piernas y la pérdida de dedos de su mano izquierda —con la cual pintaba— auguraban un panorama gris para quien hasta ese entonces había dedicado su vida al arte plástico y cuyas colecciones se exhibían lo mismo en México que en Holanda, Francia, España, Alemania o Estados Unidos.
La recuperación, lenta y muy larga, no hicieron más que reafirmar el optimismo, las ganas de vivir y la vocación artística de Zardaín, quien en cuanto pudo, inició una nueva etapa creativa, ahora, con la mano derecha.
“La obra ha gustado”, dice emocionado en entrevista realizada con motivo de la creación de un mural en la entrada principal del Tecnológico Superior de Xalapa.
Sí, con tornillos en las piernas y no recuperado al cien por ciento, Manuel Zardaín aceptó la invitación del director de la casa de estudios de pintar un mural de siete metros de alto por cinco de ancho donde plasmará edificios y escenarios emblemáticos de Veracruz, sus personajes, sus costumbres y tradiciones, en contraste con la tecnología y la robótica, áreas a las que aportan los jóvenes que estudian en ese recinto educativo.
Orgulloso, motivado por hacer lo que le apasiona, el artista rememora que además de este mural, pintó otro recientemente en el Hospital Regional de Boca del Río, en agradecimiento porque fue allí donde le brindaron la atención necesaria para que no perdiera la pierna y la mano izquierdas que, en otro hospital, le habían asegurado no era posible salvar.
NATURALEZA INQUEBRANTABLE
A Zardaín, de 67 años, lo sigue manteniendo con mucho ánimo su ímpetu por explorar, descubrir, imaginar y reinventarse cuantas veces sea necesario.
En estas construcciones y deconstrucciones se siente fortalecido, vencedor de lo adverso, y así como es reconocido como ser humano por quienes le conocen, también como artista es homenajeado. Actualmente cincuenta obras suyas, de pequeño, mediano y gran formato, son exhibidas en la Ciudad de México. Costumbrismo y color permanece a la vista del público las 24 horas del día, iluminada, en la Galería Afirme.
La magia que comparte en aquel lugar, dentro de aproximadamente diez días, en el Tecnológico Superior de Xalapa, también podrá ser apreciada en aspectos sencillos de la vida cotidiana, ésos que resguardan lo mismo la belleza y la armonía, que el orden y el caos.
