Regresa la puesta en escena El viaje de Pico, con música del compositor Leonard Bernstein, interpretada por el virtuoso violinista oaxaqueño Jascha González, quien estará acompañado por el pianista Alejandro Cámara, el grupo Merequetengue y Cardinal.
En el Rincón de los Títeres, la obra que integra danza, música y teatro con títeres ofrecerá sólo tres funciones, mañana a las 17 horas y el domingo dos presentaciones a la una y cinco de la tarde.
Entre la densa neblina de un misterioso bosque, un silencioso crujir anuncia que Pico… ¡ha nacido! Al dejar su cascarón y buscar a su madre, se da cuenta que está solo, y se pregunta el porqué, cuando de pronto aparece una mariposa que al agitar sus alas le muestra un camino. Pico descubre que existe vida después del horizonte y decide emprender un viaje. Pico es un pato que ha nacido en la soledad, temeroso ante lo desconocido, pero que motivado por la curiosidad emprende el vuelo hacia nuevos caminos y grandes aventuras. En este viaje encontrará las diferentes formas del amor a través de otros seres y en distintos lugares, descubriendo así el mejor lugar para ser él mismo.
Concepciones del amor
El viaje de pico es una recreación coreográfico-musical inspirada en El banquete (también conocido como El simposio), obra literaria del filósofo griego Platón, en la que se expone su particular postura acerca del amor ideal. La música que acompaña a Pico, basada en el texto de Platón, es la Serenata para violín y orquesta de Leonard Bernstein (1918-1990). Fragmentada en cinco movimientos, la obra se centra en el discurso sobre las variaciones y ambigüedades comprendidas en las diferentes concepciones platónicas del amor. La parte coreográfica demuestra la esencia de los conceptos de Platón en el andar de Pico por la vida, es decir, la idea del amor bajo una perspectiva filosófica.
A manera de preámbulo a El viaje de Pico, se presenta la Sinfonía de los juguetes, obra atribuida a Franz Joseph Hadyn (1732-1809), aunque investigaciones recientes apuntan a que la pieza fue compuesta por un monje benedictino austriaco, de nombre Edmund Angerer (1740-1794), sin embargo la autoría le fue otorgada al famoso autor vienés Hadyn, lo que facilitó su éxito comercial. Años después de la muerte de Angerer la pieza pasó a conocerse como la Sinfonía de los juguetes.
La peculiaridad de esta breve sinfonía recae en el empleo que hace de los diversos juguetes como instrumentos musicales: a lo largo de la obra se escuchan un cucú, un ruiseñor, una matraca, una pequeña trompeta, entre otros, sonidos que se conjugan con los de una orquesta clásica para darle un sello infantil.
La dirección escénica está a cargo de David Aarón Estrada, el diseño de producción es de Lorenzo Portillo Armendáriz, la coreografía de Emmanuelle Lecomte y al violín participa Lázaro Jascha González.
El grupo de bailarines está integrado por Marisol Bandala, Rubén Tablada Juárez y Lael Ibañez Zili. La actuación y animación son de Lorenzo Portillo Armendáriz, Deivin Uriel Viveros, Melisa Cruz y Saulo Domínguez.
El Rincón de los Títeres se encuentra en la calle Benito Juárez esquina con Manuel Ávila Camacho, junto al monumento a la Madre, la obra es recomendada para niños de todas las edades. Para mayores informes marque al teléfono 186 99 41.
