Con la obra “Platos”, el xalapeño Rabí Montoya obtuvo el primer lugar de la novena edición de la Bienal de Cerámica Utilitaria Contemporánea, certamen que otorga estímulos económicos a los tres primeros lugares y cuyo objetivo es promover el diseño, así como la calidad y la creatividad de los creadores mexicanos.
“Para mí la Bienal siempre ha sido muy importante porque son pocos los espacios que le dan cabida a la cerámica y que la elevan al grado de estar en una galería. He participado porque creo que lo utilitario no demerita en nada el aporte estético o artístico. Además, la cerámica utilitaria tiene tres retos muy importantes: debe funcionar, tiene que ser cómoda para usarla y despertar el interés para que realmente alguien la quiera tener consigo”, declaró en entrevista el ganador.
Feliz, explicó que uno de los sellos de su trabajo en esculturas es el lustre de oro, y en este caso también lo quiso usar.
El oro está incluido en mi paleta de esmaltes, de color. Por otra parte, soy admirador de la naturaleza y la vida, por eso los motivos que decoran los platos son hojas, porque el ambiente en el que vivo me inspira mucho. Las hojas que dibujé son de plantitas que hay en mi taller.
PREMIOS A LA CREATIVIDAD
El jurado, integrado por Gloria Carrasco, Héctor Rivero Borrel y Mariana Velázquez, conoció el trabajo de participantes de 21 estados de la República, de quienes eligió 55 obras para la etapa de preselección y 49 para la fase final.
Por “cumplir con los criterios de técnica, calidad, creatividad y diseño”, los artistas deliberaron que el segundo lugar fuera para Mariana Villa Reyes, de la Ciudad de México, por su pieza Mictlán, en tanto el tercer lugar fue para el oaxaqueño Vicente Juan Hernández, por Entre pencas.
También entregaron tres menciones honoríficas: a Mateo Hernández, de Oaxaca, por Vajilla contemporánea sobre engobe; Víctor Hugo Aguilar, de la Ciudad de México, por su Plato juego de pelota, y Luis Batres Muñoz, de Querétaro, por Copas de té.
Además de las obras ganadores, las otras 43 están a la vista del público en la Galería de Arte Contemporáneo de Xalapa, espacio donde se efectuó la ceremonia de premiación, acto que por primera vez se hace fuera del recinto oficial, el Museo Franz Mayer, donde surgió este certamen por iniciativa de Andrea Cabello.
Es el único concurso en el país sobre cerámica utilitaria de diseño contemporáneo; a 18 años, su objetivo principal sigue siendo atender a los ceramistas, artesanos, diseñadores, y quien desee participar. No hay límite, siempre y cuando respeten lo indicado por la convocatoria.
Las anfitrionas de la Bienal, Silvia Alejandre Prado, directora del Instituto Veracruzano de la Cultura; Carmen Díaz, directora de la Galería de Arte Contemporáneo, y Monserrat Sánchez, encargada de proyectos especiales del IVEC, celebraron que Xalapa sea sede de este certamen, que en esta ocasión se amplía con diversas actividades, las cuales van, desde expo-venta y charlas, hasta conferencias y talleres en recintos de la capital del estado, Coatepec y Veracruz puerto.
INVITACIÓN
La exposición en la GAC (Xalapeños Ilustres 135) es de entrada libre. La invitación es para conocer un trabajo diverso de ceramistas de Baja California, Ciudad de México, Coahuila, Colima, Estado de México, Guanajuato, Jalisco, Michoacán, Nuevo León, Oaxaca y Veracruz.
Por supuesto, está la obra ganadora del primer lugar, realizada por quien ha destacado en distintas bienales, tanto de escultura como de cerámica. Rabí Montoya (1985) es licenciado en Artes Plásticas por la Universidad Veracruzana y maestro en Estudios sobre el Arte por el Instituto Universitario Realia. Ha expuesto individual y colectivamente en distintos espacios y se ha desempeñado como docente, técnico académico del Instituto de Artes Plásticas de la UV y restaurador de piezas arqueológicas de cerámica en el Museo de Antropología de Xalapa.
En la Bienal de la cual hoy es ganador, ya había tenido presencia en la 4ª , 5ª y 7ª edición; en esta última obtuvo Mención Honorífica con la obra titulada “Chawan”.
Para Rabí, en este momento, el arte es un lenguaje, “una manera de hablar desde otras perspectivas. Hablar sin palabras. Cautivar los sentidos de otra manera”.