El mexicano Julio César Chávez, excampeón del mundo en las divisiones de peso superpluma, ligero y superligero, afirmó que en el presente no habría dinero suficiente para pagar una bolsa de una pelea como la que tuvo en 1990 ante Meldrick Taylor.
"No hay dinero que alcance para algo así, no podrían pagarme por una pelea como aquella, aunque hoy se paguen cantidades gigantescas de dinero", compartió Chávez al final de su presentación como Míster amigo, un acuerdo binacional entre las ciudades de Brownsville, Texas, Estados Unidos y Matamoros, Tamaulipas para fortalecer sus lazos.
El 17 de marzo de 1990 Chávez, campeón Superligero del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), se enfrentó en Las Vegas, Nevada, al estadounidense Meldrick Taylor, monarca Superligero de la Federación Internacional de Boxeo (FIB).
Hasta el undécimo asalto Taylor aparecía como ganador en las tarjetas, pero en el último, a 15 segundos del final, Chávez conectó a Taylor un derechazo violento que lo mandó a la lona y le dio la victoria en la considerada mejor pelea de 1990.
Chávez se llevó una bolsa de 1,4 millones de dólares y Taylor se embolsó 1 millón.
Mauricio Sulaimán, presidente del CMB, respaldó las palabras del excampeón.
"Chávez es el más grande de toda la historia del boxeo mexicano y aunque las bolsas hoy día son millonarias, si Floyd Mayweather ganó 300 millones de dólares en una pelea, imagínate cuánto ganaría Chávez, sería algo de fantasía", sentenció Sulaimán.
Y la muestra del imán que genera en el presente Julio César Chávez son las peleas de exhibición que aún tiene a sus 57 años.
"Pasa el tiempo, vienen los recuerdos y los reconocimientos y no quedan palabras para toda la gente que recuerda mis peleas y me pide fotos y autógrafos, tengo 57 años y la cosquillita del boxeo se mantiene en mí, ya tuve una exhibición con el "Travieso" y tengo pactada otra más".
Julio César Chávez se midió en pelea de exhibición el 22 de noviembre de 2019 ante su compatriota Jorge 'Travieso' Arce, excampeón minimosca y mosca del CMB, de la que salió vencedor Chávez. La nueva batalla está pactada para el próximo 7 de marzo en Hermosillo, Sonora.
"Todos los días batallo y entreno mi cuerpo, pero lo más importante es estar limpio de droga y alcohol, y ahora me ha dejado ayudar a mucha gente que tiene estos problemas, porque yo ya me hubiera muerto si no me hubiera recuperado".
Chávez presumió que tiene 10 años limpio de drogas y alcohol y por eso busca con estas peleas de exhibición ayudar a quien lo necesite.