Boca del Río, Ver.-Con una obra que avanza muy lentamente, el estadio Luis El Pirata de la Fuente luce en ruinas con el riesgo de que no se entregue en las fechas prometidas.
Han pasado nueve meses desde que el gobernador del estado, Cuitláhuac García Jiménez junto con sus secretarios de gabinete anunciaron los trabajos de remodelación del estadio Luis “El Pirata” de la Fuente que tendrían una inversión inicial de 300 millones de pesos.
Fue el 13 de febrero del presente año, en una ceremonia realizada en el coloso del Virginia que se afirmó que como el estadio era inmueble que pertenecía al estado, era obligación del gobierno hacer los trabajos correspondientes
En el evento, parte del lugar fue demolido y se proyectó que en diciembre de este año se tendrá concluida la primera etapa del proceso, que consistía en que la parte inferior, conocida como la zona de palcos y plateas, debía estar terminada.
La segunda etapa tendrá que ser entregada en agosto del próximo año y la obra en conclusión en diciembre del 2024 y se prometió que el inmueble tendría una capacidad de 28 mil asistentes.
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Fue el entonces titular de la Secretaría de Educación, Zenyazen Escobar García quien dio detalle de que los trabajos de demolición habían iniciado en diciembre del 2022 y que en ese momento se estaban realizando trabajos de demolición de pisos para reforzar la cimentación de trabes intermedias en sección de rampa aérea así como el desmantelamiento de rampas.
Sin embargo en el lugar parece que se ha detenido el tiempo y los trabajos lucen igual como hace nueve meses con apenas unos cuantos obreros yendo y viniendo con algunos restos del estadio.
Incluso vecinos de la zona expresan que no se ha hecho nada al lugar y que desde que se derrumbó se ve igual.
“Diariamente paso por la zona porque saco a pasear a mis perritos pero la verdad es que yo lo veo igual, si supe, por mi hijo que iban a hacer otro edificio pero no sé qué han hecho”, expresó una vecina de la calle Zumárraga en el fraccionamiento Virginia.
El mismo titular de la Procuraduría estatal de Protección al Medio Ambiente, Sergio Rodríguez Cortes informó en entrevistas pasadas que los tiburones que adornaban la entrada del estadio serían llevados al Acuario de Veracruz, pero al ser unas estructuras muy pesadas y grandes no se ha podido hacer el traslado. De hecho uno de los tiburones está muy dañado y se tendrá que reconstruir.
El estadio fue inaugurado un 17 de marzo del año de 1967 e inicialmente fue llamado “Estadio Veracruzano” pero años después en reconocimiento al futbolista veracruzano Luis de la Fuente Hoyos a quien apodaban “El Pirata”, el lugar cambió de nombre a Luis El Pirata de la Fuente.
El lugar se convirtió en la casa del club Tiburones Rojos de Veracruz que inició en la liga el 9 de abril de 1943 y se convirtió en el equipo de los veracruzanos haciendo vibrar el estadio durante los encuentros deportivos.
En el 2019 tras la desafiliación del equipo y la desaparición del club, el estadio quedó en desuso por un año hasta que fue utilizado por el Atlético Veracruz y posteriormente quedó en el abandono y empezó su deterioro.