Ya es una costumbre que América se meta al Akron y se lleve una victoria. Han sido 15 juegos en el redil rojiblanco en la historia y las Águilas, incluido el de anoche, se han llevado ocho veces la victoria.

Hoy en Zapopan, los cremas mostraron su poderío por más de 60 minutos, para exhibir a las Chivas en una edición más del Clásico de México. La reacción tapatía no se hizo esperar, pero no fue suficiente, América, como ya es un común, triunfó en la casa de su máximo rival, 2-4 final.

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El juego no tuvo round de estudio. Los azulcremas mostraron su poderío desde el principio, Valdés puso la primera en el larguero. ¡Se salvaron las Chivas!

América fue mucho más que su rival. Dos Santos, Fidalgo y Valdés dominaron el medio sector, los pases de el tridente pusieron a Wacho Jiménez en apuros. El dominio fue tal que el Cabecita Rodríguez hizo el primero tras pase del Valdés. Guadalajara no llegó al partido, en un abrir y cerrar de ojos le cayeron dos más en la cuenta. Cabecita Rodríguez hizo el segundo, mientras que Leo Suárez concretaba el tercero. El abucheo fue total cuando ambos se fueron al descanso.

En el complemento llegó la humillación. Henry Martín apareció tras un centro y festejó por partida doble tras su anotación. Primero se tiró a la red y después hizo el polémico festejo de Cuauhtémoc Blanco al estilo perrito.

América se confió y lo pagó caro. Lara hizo un autogol para poner en el partido al Rebaño, que peleó hasta lograr el segundo gracias al recién ingresado Morsa Flores.

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Tano Ortiz cerró el partido con cambios. El ritmo se fue poco a poco hasta el pitido final. No hubo más en el Akron, América volvió a triunfar… ¿en su nueva casa?

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