El exastro del fútbol brasileño Ronaldinho cumplió 67 días preso en Paraguay imputado por uso de pasaporte adulterado, intentando obtener su libertad por un delito que la ley local castiga con hasta 5 años.
"Esperamos que la fiscalía se convenza y permita que Ronaldinho y su hermano (Roberto de Assis Moreira) vuelvan a su país. No nos queda otra que esperar que termine la investigación", dijo una fuente de la defensa a la AFP.
La ley faculta a la fiscalía a disponer de seis meses para investigar los hechos punibles.
Atrapado entre la cuarentena por el coronavirus, su deseo de libertad y el proceso que se le sigue, el exastro del Barcelona y el París Saint-Germain evade la prensa y prefiere el bajo perfil en su "celda de oro", un un exclusivo hotel de Asunción que habita desde hace 37 días y que le sirve de prisión domiciliaria.
El exjugador de la "eterna sonrisa", reconocido como uno de los talentos más grandes de la historia del fútbol brasileño, pagó 1.600.000 dólares como garantía para conseguir su salida y la de su hermano de la Agrupación Especializada de la Policía en Asunción.
En el cuartel, donde estuvo detenido 30 días, convivió con presidiarios también especiales, entre agentes con causas criminales, narcotraficantes y hasta políticos acusados por corrupción.
El campeón mundial en Corea del Sur y Japón-2002, de 40 años, transcurre su rutina en el hotel Palmaroga, localizado en el centro histórico de la capital paraguaya, donde lo acompaña su hermano y representante, imputado por la misma causa.
Para romper el tedio
Para romper el aburrimiento, la administración le habilitó un salón 30x15 para sus prácticas de pelota y además dispone de gimnasio y una sobria piscina.
"No existe una sola prueba seria que lo incrimine", aseguró a la AFP el presidente del sindicato Futbolistas Asociados del Paraguay (FAP), Rogelio Delgado.
"A pesar de que tiene un presidio de lujo, es muy injusto que siga preso", agregó Delgado, excampeón de América con la selección paraguaya y de la Libertadores con el Olimpia, ambos en 1979.
Entre otros exjugadores paraguayos, Delgado visitó a Ronaldinho durante su reclusión en el cuartel poco antes de decretarse la cuarentena por el coronavirus.
"Esperamos que la fiscalía se convenza y permita que Ronaldinho y su hermano vuelvan a su país. No nos queda otra que esperar que termine la investigación", dijo una fuente de la defensa a la AFP.
La fiscalía mandó aprehender a 18 personas en torno al affaire.
Este martes, la fiscala general del Estado, Sandra Quiñonez, rechazó un pedido recusación contra los cinco fiscales que realizan la pesquisa presentado por dos de los paraguayos acusados.
"Jamas imaginé pasar por una situación así", sostuvo Ronaldinho al diario ABC local en la única entrevista que concedió hasta ahora a un medio, difundida el 27 de abril.
"Me quedé totalmente sorprendido al saber que los documentos no eran legales", expresó 'Dinho'.
Los investigadores parten de la premisa de la existencia de toda una red de falsificación de documentos públicos de contenido falso.
"Vamos a determinar si esto tiene conectividad con una red criminal que trafica pasaportes que comprometen el nombre del Paraguay. Es muy grave", dijo a la AFP el fiscal Marcelo Pecci, quien dirige la pesquisa.
Pecci admitió que tanto Ronaldinho como su hermano colaboraron. "No mintieron", manifestó.
"Tenemos comprobado el uso doloso de esos documentos falsos. Esos pasaportes les iban a dar acceso al mundo en nombre del Paraguay", enfatizó.
Acerca de una supuesta conexión de este caso con la explotación clandestina de juegos de azar en Brasil, como señalaron algunas publicaciones de prensa de ese país, Pecci dijo que la fiscalía no descarta nada.
"Estamos en la etapa investigativa y cualquier información cierta puede ser relevante para el Ministerio Público".
Las sospechas apuntan además a un posible intento de lavado de dinero. "Podemos ligarlo también a otro tipo de hechos, lavado de dinero por ejemplo", señaló el fiscal.
Preguntado si aún con tantas vertientes de investigación, la fiscalía puede estar de acuerdo en liberar a Rolandlinho, Pecci contestó: "No estamos cerrados".
"En cualquier caso, el Ministerio Público no prescindirá de la caución (de 1.600.000 dólares)", puntualizó.
El motivo: Si Ronaldinho y su hermano recuperan su libertad y vuelven a su país, por la Constitución, Brasil no extradita a sus connacionales.