La xalapeña y medallista internacional en gimnasia rítmica, Kimberly Salazar López, recientemente estuvo en la capital veracruzana de descanso y durante su estancia visitó el club de Thaylex Gimnasia Rítmica, en donde su hermana diariamente imparte la disciplina a niñas de varias edades.
Salazar López de 19 años de edad fue parte del equipo mexicano de gimnasia rítmica que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) rescató de Israel, país de Medio Oriente, que actualmente se encuentra en conflicto.
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La deportista, quien a los 11 años partió a la Ciudad de México en busca de su sueño, que es ser de las mejores del país y del mundo, recientemente logró el boleto olímpico para París 2024 y contó que ya está trabajando ser parte del equipo; ella será la primera xalapeña que participará en la fiesta olímpica con la gimnasia.
“En los Panamericanos me fue muy bien, logramos el objetivo que fue buscar la plaza olímpica y a parte logramos tres medallas de plata en la categoría en conjunto mayor, ahora vamos a retomar entrenamientos e intentar nuevas cosas para montar las rutinas para el siguiente año, pues con los Panamericanos cerramos ciclo competitivo”, detalló.
Indicó que ganaron el nombre como conjunto y fue algo histórico, “por ser las primeras en lograr el pase y ahora vamos a entrenar igual para que se defina las cinco gimnastas que van a ir”.
¿Cómo inició Kimberly Salazar en la gimnasia?
Este deporte que practica desde los 6 años, prácticamente ha sido parte de su vida, pues desde pequeña le ha dedicado mucho tiempo y esfuerzo, “es un amor muy fuerte a esta disciplina, ya que desde los 6 la practico; actualmente tengo 12 años”.
La deportista ha sido cinco años campeona en olimpiadas nacionales como juvenil individual; medallista en Campeonatos Panamericanos , también en juvenil Individual; campeona con tres medallas de oro en Juegos Centroamericanos en conjunto y ahora en Juegos Panamericanos con tres medallas de plata.
Acepta que ha sacrificado muchas cosas para lograr lo que tiene, como el dejar a sus padres, amigos, no poder estar en festejos familiares y además depender de ella misma, sin embargo, destaca que ha valido la pena, pues la motivación que la mantiene fuerte es que siempre ha pensado en Juegos Olímpicos y está muy cerca de asistir.
“Honestamente si lo imaginaba, pero no creí que fuera a pasar tan rápido, es decir, que se dieron las cosas en el momento adecuado y gracias al trabajo que hemos hecho, he ganado Panamericanos individual, Centroamericanos en conjunto y Juegos Panamericanos en conjunto”, indicó.
Kimberly Salazar es de las mejores de México, por lo que su lugar en la selección nacional está seguro, pues los resultados que ha demostrado son muy importantes.
“Ahora mis objetivos son preparar mis nuevas rutinas que están un poco más con dificultad, además, más que nada seguir enfocada en el trabajo, igual de atenta”, indicó.
Recomienda la gimnasia
La campeona nacional recomienda a más niñas que practiquen la gimnasia, “ya que es un buen deporte, es complicado, pero no imposible y muy bonito. A mí me ha dado disciplina, pero te tiene que nacer para hacerlo sin que esté el entrenador, las cosas lo tienes que hacer por tu propia cuenta y eso lleva al éxito”.
Ya concentrada en la Ciudad de México, Kimberly despierta a las 6:40 de la mañana; desayuna a las 7, luego entrena hasta las 13:30 horas, come, descansa, y a las 15 horas una vez regresa al entrenamiento hasta las 20 horas, luego cena, hace tareas, y duerme para una vez más al siguiente día realizar la misma rutina.
“Estar ahí es como una segunda familia, con la entrenadora y mis compañeras, como estamos todo el tiempo juntas, entonces se forma una familia. Ahora mi meta es ir a los Juegos Olímpicos, es lo más profesional. La verdad si me veo peleando con las potencias mundiales, que son, Israel, Italia, España y Bulgaria; ya las he enfrentado, la verdad tienen un buen potencial, pero México va destacando y vamos poniendo el nombre más arriba”.
Por último, agradeció a la Sedena por el rescate del equipo mexicano de gimnasia rítmica que estaba en Israel, además, “porque no solamente fueron por nosotras, sino que también le abrió las puertas a los mexicanos. Muchas gracias, obviamente al Gobierno de México, y más que nada a los mexicanos que nos hicieron virales para que nos pudieran escuchar, también doy gracias a mis compañeras de equipo, a mi entrenadora, a mis papás y mi hermana”, concluyó.