Xalapa, Ver.- Esa mañana el estudiante universitario citó a su novia, quería saber los motivos que la orillaron a terminar su relación. El joven se aferraba a un imposible y a toda costa quería continuar, sin embargo ella decidida y definida acudió a su encuentro para ponerle fin a ese amorío.
Él era un hombre con una filosofía maléfica, desafortunadamente común en nuestra sociedad, era de los que creen que las sagradas mujeres son objetos, una propiedad, y al pensamiento de “serás mía o de nadie” sacó su cuchillo e invadido por una ira incontrolable le asestó varias puñaladas hasta acabar con su vida.
Ese fatal caso, lamentablemente, no es exclusivo, es con lo que se vive todos los días, las estadísticas no mienten y quizá hasta cortas se quedan, pero al menos en enero de este año cada día asesinaron a 10 mujeres, según una encuesta del Instituto Nacional de Estadística, cifra que va más allá de lo alarmante.
Cuatro deportistas amateurs y profesionales rechazan tajantemente esa situación que hace vivir a las mujeres con miedo y respaldan el movimiento “Un día sin ellas”, en una muestra de total repudio a la violencia contra la mujer, pero coinciden en que ese mal debe tratarse desde el seno familiar, desde sus raíces y su núcleo.
“Al final de cuentas nosotros debemos valorarnos en no aguantar maltratos, somos mujeres con sentimientos, importantes, que estamos apoyando siempre a los hombres, a los hijos, pero el respeto debe empezar por nosotras mismas”, dijo la exatleta internacional Romary Rifka.
Sobre el movimiento nacional que harán el lunes las mujeres, la exsaltadora de altura reconoció que se ven obligadas a realizar ese paro para mostrar a todos lo importantes y útiles que son para el equilibrio de una mejor sociedad.
Por su parte, la maratonista María Enriqueta Peña destacó que esto puede acabar si en la casa de cada persona se inculcan valores. “Desde el hogar debe existir la educación y los valores, ya que si en casa los hijos ven el maltrato de su papá hacia la mujer, en este caso hacia su mamá, pues siguen esos patrones de conducta y terminan actuando igual”.
Asimismo, dijo que alguien debe poner un alto a tanta violencia contra la mujer. “Las autoridades ya deben actuar con severas leyes y ponerlas en práctica para que no haya tanos delincuentes”.
En tanto, la maestra Martha Hernández, quien acude de manera asidua al Cerro de Macuiltépec a trotar o practicar zumba, comentó que la violencia hacia las mujeres no era común en épocas pasadas. “Es algo que antes casi no se sabía, pero creo que es el machismo de algunos hombres, pero sobre todo que la mujer lo permite, y bueno de ahí se desencadena esto”.
Reconoce que las mujeres son vulnerables. “Desgraciadamente las mujeres y en especial las niñas somos más susceptibles”, expresó.
Con cierto temor nos relata que anteriormente el “gigante verde” fue muy nombrado porque se habló de los abusos de una persona contra varias mujeres que acudían para realizar algún ejercicio. “Lo que ocurrió en el Cerro hace un tiempo fue por falta de vigilancia y por una persona que estaba muy dañada mentalmente, fue horrible pero desgraciadamente así estamos”.
Finalmente, la reconocida instructora de activación física, Betty Fuentes no quitó el dedo del renglón y opinó que en cada familia debe haber respeto.
Esa manifestación es respetable, pero ojalá se le inculcara a los hijos los valores del respeto, la honestidad, el trabajo, pero sobre todo el amor desde casa, con el ejemplo de nosotros los padres y principalmente busquemos a Dios nuestro creador como piedra angular de nuestras vidasBetty Fuentes
El grito es el mismo, todas las mujeres piden valor, reconocimiento, pero sobre todo un respeto que se ha perdido con el correr de las generaciones.
Es por eso que “Un día sin ellas” va más allá de un movimiento, una protesta, un paro o una manifestación, es un clamor general de las mujeres para que paren una violencia extrema en su contra.