Los organizadores de los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeongchang confirmaron 130 casos de norovirus, después de que los casos de enfermos se hubieran casi triplicado desde la víspera en esta ciudad surcoreana.
Ningún deportista figura entre los casos confirmados hasta ahora y los organizadores hacen todo lo posible para evitar problemas por esta cuestión. Ese virus provoca diarreas y vómitos. "El 6 de febrero teníamos 32 casos, el miércoles registramos 54 casos más", explicó Kim Hyun-Jun, director del Centro Coreano de Control y Prevención de Enfermedades, en una conferencia de prensa. Los organizadores señalaron que este día de la inaguración el número aumentó a 130 enfermos.
Entre las personas enfermas, tres forman parte de los equipos que preparan las comidas en la Villa de la Prensa. El agua y la comida son dos de los transmisores principales del norovirus.
El martes, los organizadores habían anunciado que 1.200 agentes de seguridad se habían visto forzados a retirarse de sus funciones por precaución y fueron reemplazados por centenares de soldados desplegados para garantizar la seguridad de las sedes olímpicas. Los agentes de seguridad, todos ellos empleados de la misma sociedad, se alojaban juntos en un centro de entrenamiento para niños de Pyeongchang.
Esos edificios, separados de las sedes olímpicas, parecen ser el epicentro de la epidemia.
Con información de AFP.