Xalapa, Ver.- Cuando el beisbolista Pedro Antonio Reyes Sacramento estampó su firma que lo une a los Filis de Filadelfia de las Grandes Ligas revivió aquellos años de niño cuando por diversión se dedicó a jugar beisbol.
No tenía conciencia de lo que era una firma de Grandes Ligas, jugaba por diversión porque siempre me ha apasionado el beisbol, pero nunca pensé que iba a llegar a la grande
El jugador de 17 años de edad comentó con un clásico acento sureño, que por sus venas corre sangre beisbolera. “Por eso me metí a jugar porque la familia por parte de mi papá es beisbolera, y tengo un primo que fue el que me aconsejó a practicar este deporte”, dijo.
Recordó que a los 8 años, en sus inicios, debía viajar por espacio de una hora desde Hueyapan de Ocampo hasta Acayucan, donde participaba en la liga de allí con el equipo Toritos de Hueyapan.
Sabe que este paso que dio no cualquiera puede darlo, y hará todo por llegar a la gran carpa.
Significa mucho para mí, para mi familia y mis entrenadores, es algo muy emocionante, significa que se hizo realidad mi sueño, un sueño que comenzó a los 12 años de edad cuando empecé a tener noción de lo que era todo esto
Se considera un chico normal, centrado en lo que quiere y con los pies en la tierra. “Soy una persona humilde, sencilla, eso me lo han inculcado mis padres, mis entrenadores, pero a la hora del juego soy aguerrido… disfruto cada juego, cada lanzamiento, cada strike”.
Comentó que previo a la firma con la legendaria novena estadounidense, acudió a un try out.
Asistí a unas pruebas que realizó la Academia Tobis de Acayucan, allí me agarró Francisco Rivera y estuve participando en el programa de Probeis (Presidencia para la Promoción y el Desarrollo de Beisbol en México) de prospectos mexicanos en Guadalajara y más tarde a Tijuana”
Por cierto, fue en la fronteriza ciudad donde fue detectado en la Serie Internacional.
El joven pelotero reconoce que dio un primer paso, pero que el camino es aún muy largo. “Voy para República Dominicana, allá los Filis tienen una academia, un complejo donde seguiré trabajando y luchando para lograr mi objetivo”, agregó el talentoso lanzador.
Es muy difícil porque hay muchos prospectos que llegan de todo el mundo. Hay dominicanos, venezolanos, va gente con mucho talento, pero a veces para un mexicano es algo difícil, más complicado, se tiene que luchar de más para llegar a la gran carpa; esto no es de la noche a la mañana
El serpentinero no tiene fecha exacta para concentrarse en República Dominicana, donde deberá iniciar su proceso encaminado a un debut no muy lejano en las Grandes Ligas. “No me la han dado, pero al parecer viajaremos en febrero”, sostuvo.
Por último, señaló que desde que firmó con los Filis todos en su casa están felices. “En mi familia están todos muy contentos y orgullosos porque ven que he avanzado mucho y estoy a un paso de llegar a la grande”.
Junto al pitcher derecho firmaron también para los norteamericanos, Édgar Zúñiga, de Pánuco y Jared Loza, de Cotaxtla.