Singapur.- La estadounidense Sloane Stephens, campeona del US Open, logró su segunda victoria en las Finales WTA, y la alemana Angelique Kerber, ganadora de Wimbledon, la primera, en una jornada que acabó sin que todavía se conozca ni una jugadora con plaza asegurada para las semifinales.
Kerber venció a la japonesa Naomi Osaka por, 6-4, 5-7 y 6-4, en dos horas y 29 minutos, y luego Stephens a la holandesa Kiki Bertens, por 7-6 (4), 2-6 y 6-3 en dos horas y 20 minutos.
De ocho partidos disputados en lo que va de torneo, sólo los dos de la primera jornada fueron a dos sets, el resto consumieron los tres parciales, y superando casi todos las dos horas, prueba inequívoca de la gran igualdad que existe en esta edición. Sólo en 2009 hubo tantos partidos a tres sets (de los 12 de la primera fase, seis fueron a tres mangas)
El pasado año, a estas alturas del torneo, sólo se habían dado dos partidos al mejor de tres mangas. Si hoy la ucraniana Elina Svitolina gana solamente un set contra la danesa Caroline Wozniacki en el grupo Blanco, será la primera en lograr el gran objetivo de las ocho participantes.
Kerber, semifinalista hace dos años, sufrió para superar a Osaka, e inaugurar su casillero de victorias. Y al final acabó con algunos problemas en la espalda.
El duelo entre la campeona de Wimbledon y la del Abierto de EE.UU. se decantó del lado de la germana en una dura lucha, con la recompensa de mantenerse viva en la lucha por las semifinales.
Kerber lleva ya cuatro victorias consecutivas sobre la nipona, a la que venció este año en Wimbledon en su camino hacia la final. La japonesa, que lució una coleta, en vez de llevar el pelo suelto como en días anteriores, había ganado el primero de los cinco duelos entre ambas, en el Abierto de EE.UU. el año pasado, pero ayer falló en convertir las 18 oportunidades que tuvo para romper el saque de su rival, logrando sólo en cinco.