Qué bien le sienta México a David Ferrer.
Venía en un año dubitativo, perdiendo en las primeras rondas de los torneos, pero apenas pisó después de 24 meses el estadio Pegaso y volvió a ser el “Rey”. El tenista español se deshizo de un rival que a priori parecía muy incómodo y consiguió su boleto a la segunda ronda del Abierto Mexicano de Tenis.
Ferrer venció en sets corridos con parciales de 6-4 y 6-3 al ruso Andrey Rublev, quien lejos de sentirse cómodo en la superficie azul de Acapulco acusó la falta de experiencia para contrarrestar el juego incisivo de su oponente. El ganador, de 36 años y número 30 del mundo, tuvo un emotivo recibimiento por los cerca de cinco mil aficionados que se dieron cita en la cancha principal del Complejo Deportivo Mextenis.
El público tiene memoria y no olvida las cuatro veces que ha visto coronarse a David en Acapulco. La última en el 2014. Es una realidad que ya no tiene la rapidez de antaño, pero su mano derecha sigue intacta. Capaz de pelotear con una de las nuevas figuras de la Nueva Generación de la ATP.
David ganó su compromiso de primera ronda tras una hora y 23 minutos de acción, donde le quebró el servicio a su oponente en siete de las 11 ocasiones que dispuso. Al español lo espera en la siguiente etapa el ganador del choque entre Juan Martín del Potro y Mischa Zverev, en lo que pinta para otro agarrón.
En el otro gran partido del día, con sabor estadounidense, Ryan Harrison confirmó que en Acapulco juega su mejor tenis y se encargó en primera ronda del gigante John Isner.
Harrison, que ha dado más nota en las últimas semanas fuera de las canchas al ser acusado por comentarios racistas, volvió a sorprender al público mexicano al superar por 6-3 y 7-6 al octavo cabeza de serie.
De poco o nada le sirvió a Isner convertir 17 ‘aces’, su punto fuerte. Con su saque siempre ha sido poderoso y lo hizo de nuevo con el 65% de efectividad con su primer servicio. A Harrison le bastó con sus ocho servicios ganadores para sacar su boleto a la segunda instancia. Su próximo adversario saldrá del duelo que sostendrán mañana el argentino Diego Schwartzman y el español Fernando Verdasco.
Otro de los tenistas que se mantuvieron con vida fue el norteamericano Jared Donaldson, quien necesitó de únicamente 49 minutos para derrotar (6-3, 3-2 y retiro) a Nikoloz Basilashvili.