Buenas nuevas surgieron de la escuela de futbol Delfines de Xalapa, luego que dos de sus integrantes se ganaron el derecho de entrenar con las filiales de Toluca y Necaxa.

Se trata de Andrés Eduardo Sánchez Pérez, un jugador de media altura, cuyo juego se caracteriza por su constante combatividad, es duro, pero va al balón, enérgico y perseverante, destruye el juego del rival, pero arma el suyo.

Andrés Eduardo viaja hoy a Toluca, Estado de México, donde deberá presentarse con los encargados de las filiales de los Diablos Rojos.

El otro jugador es Reynaldo Alberto Aguilar Sosa, de 15 años de edad, quien fue electo en las visorias que aplicaron los Rayos del Necaxa en esta ciudad.

Las aptitudes físicas del orgullo de Alto Lucero son el buen manejo de la pelota con ambas piernas, es hábil, cabecea bien, tiene un respetable tiro de larga distancia y pases exactos en corto, es orquestador de un juego vertical, atrevido y encarador en el uno contra uno.

Este jugador, con una antigüedad de dos años en el centro de formación de los Delfines de Xalapa, probará fortuna en las básicas del club necaxista, institución que ya tuvo en sus filas a otro conocido xalapeño como lo es Bryan Colula, quien actualmente juega con los Venados de Yucatán en la Liga de Ascenso, aunque su carta pertenece a las Águilas del América.

Reynaldo ya estaba en Aguascalientes, pero tuvo que regresar para tramitar asuntos relacionados con su escuela, ya que es probable que continúe sus estudios en el hidrocálido estado.

12 años lleva Andrés Eduardo Sánchez en la institución albinaranja.

14 años de edad recién cumplió Reynaldo Alberto Aguilar Sosa.