El cáncer es la tercera causa de muerte en México por debajo de las enfermedades del corazón y la diabetes y en los últimos dos años, de la COVID-19. Por esta enfermedad fallecen 14 de cada 100 personas y la esperanza de vida de quienes la padecen es de 63 años. Está creciendo de manera acelerada, pues en 2020 se registraron 90,603 defunciones en el país.
Los tipos de cáncer diagnosticados con mayor frecuencia en mujeres son de mama, pulmón, y colorrectal y en hombres, de próstata, pulmón, y colorrectal. La Organización Mundial de la Salud estima que para el 2030 los casos nuevos sobrepasarán los 20 millones anuales. Las opciones de tratamiento incluyen cirugía, radiación, quimioterapia, terapia hormonal, inmunoterapia y terapia dirigida.
Te puede interesar: ¿Cómo impulsar las patentes y licencias en Veracruz? Químico explica
¿Qué opciones hay además de la quimioterapia para el cáncer?
El más común es la quimioterapia, sin embargo, algunas personas pueden presentar efectos secundarios severos. Esto ha llevado a que los pacientes en su desesperación busquen otras alternativas para su tratamiento y es aquí donde los productos a base de plantas medicinales juegan un papel muy importante.
El estudio de las plantas medicinales ha sido fundamental en la búsqueda de nuevos fármacos contra el cáncer. Actualmente alrededor del 60 % de los utilizados en quimioterapia provienen de una fuente natural. Entre estos encontramos a la vinblastina y vincristina alcaloides utilizados en casos de leucemia, obtenidos de la especie Catharanthus roseus, distribuida en México y conocida en Veracruz como ninfa y Teresita.
Otros fármacos son el paclitaxel (taxol), extraído de la corteza del tejo (Taxus brevifolia) que se distribuye en la costa occidental de los Estados Unidos y Canadá y la podofilotoxina, obtenida de la mandrágora americana (Podophyllum peltatum), nativa de los bosques caducifolios del este de Norteamérica y las camptotecinas, alcaloides de la corteza de Camptotheca acuminata que es un árbol ornamental chino, utilizado en la medicina tradicional.
El uso de plantas medicinales puede ser una alternativa complementaria para tratar el cáncer. Sin embargo, esto solo se podrá llevar a cabo siempre y cuando exista un diagnóstico que indique el tipo de cáncer y el tratamiento que está llevando la persona interesada. Cabe señalar que estas prácticas no deberán sustituir a los medicamentos, puesto que el cáncer debe ser tratado de manera conjunta con un médico especialista.
La medicina tradicional mexicana esencialmente atiende a los pacientes considerando los aspectos emocional, físico, espiritual y de su entorno. A través de ellos es como se logra conocer los sentimientos que se han reprimido en la persona y puede apoyar a su recuperación.
En este sentido, los médicos tradicionales reconocidos recomiendan a las personas con cáncer no suspender por ningún motivo su tratamiento médico y que reafirmen su diagnóstico para así evitar que la enfermedad evolucione.
Vuelve a leer: Ciencia y Luz | La infodemia está entre nosotros
¿Cuáles son los beneficios de la medicina tradicional?
Los beneficios que la medicina tradicional puede tener en pacientes de cáncer a través del uso de plantas medicinales se pueden observar considerando aquellas con efectos relajante, antidepresivo, analgésico, antiinflamatorio y otras que contrarresten los efectos secundarios de la quimioterapia, que ayudarían al paciente a disminuir sus síntomas, mejorar el ánimo y por tanto enfrentar la enfermedad con una recuperación más rápida.
*Centro de Investigaciones Biomédicas y Centro de Investigaciones Tropicales, Universidad Veracruzana.