Si eres veracruzano seguramente habrás probado los deliciosos pambazos, unos panecitos blancos y redondos, los cuales pueden rellenarse de casi cualquier alimento, sin embargo, los más populares son los de frijolitos con mayonesa, lechuga con tomate y jamón, los de bistec y por supuesto, los de cochinita pibil.
La historia del pambazo de Orizaba se remonta a la época del Virreinato, y lo curioso es que a pesar de ser un alimento que se comercializa a un precio bastante accesible, surgió de una petición real; aquí te contamos su historia.
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Un pan digno de la realeza e inspirado en el Pico de Orizaba
Según narra la leyenda, el popular pambazo fue elaborado gracias a la adoración que la Emperatriz Carlota y su esposo Maximiliano de Habsburgo sentían por el Pico de Orizaba, pues ambos quedaron maravillados al conocer este imponente volcán.
Así es, en base a lo que han narrado varios historiadores, el pambazo fue el resultado del chef Josef Tüdos, quien intentó plasmar en un platillo la belleza natural del volcán Citlaltépetl: la punta del pan simula el pico del volcán y la harina simboliza la nieve.
De hecho el nombre que se le dio durante la época virreinal fue ‘pan basso’ o ‘pan bajo virreinal’, fue así como surgió ‘pambazo’.
Según el historiador Armando Lopez Macip, Maximiliano y Carlota visitaron Orizaba en diversas ocasiones, la primera de ellas fue el 31 de mayo de 1864, cuando el pueblo orizabeño recibió con alegría y calidez al Emperador y su esposa.
La segunda ocasión fue en abril de 1865, cuando Maximiliano visitó la ciudad vestido de charro y pasó 21 días en Orizaba , para después dirigirse a Xalapa.
Por otra parte, la emperatriz Carlota disfrutaba mucho de visitar la ciudad orizabeña, en noviembre de 1865 viajó a Yucatán y en una escala de su viaje se hospedó en la casona de los Bringas, en la Calle Real.
El pambazo ha ido evolucionando; así es en la actualidad
Si has visitado Xalapa o Córdoba seguramente habrás probado este delicioso platillo, además, habrás notado que el pan ya no tiene forma de pico y esto se debe a que son muy pocas las panaderías que continúan elaborando este alimento de manera tradicional.
Una de las panaderías que continúa con el legado que dejó la emperatriz Carlota es la panadería Flores, ubicada en Orizaba y la cual abrió sus puertas desde 1986.
Y tú, ¿con que ingredientes preparas tu pambazo?
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