Hace 11 años doña Juana Martínez Ruiz, de 60 años de edad, inició su propio negocio en venta de tamarindo y preparados de nanche en la localidad de Tamarindo del municipio de Puente Nacional y desde entonces ha salido adelante.
Cuando tenía 14 años de edad, llegó a ese lugar y comenzó a trabajar como empleada doméstica en algunas casas, además de lavar y planchar ropa; así estuvo por varios años y gracias a esa labor sacó adelante a sus hijos.
Con el tiempo en una de las casas donde trabajaba le enseñaron a trabajar la pulpa de tamarindo, por lo que aprendió a realizar las tradicionales bolas de dulce y chile, además de hacer preparados. Las mismas personas que la conocían al ver la destreza que adquirió con el dulce, le solicitaban ayuda.
Doña Juanita contó que un conocido le insistía en que colocara su propio negocio y dejara de trabajar en las casas, pues ella tenía un don que era hacer dulces perfectos de tamarindo. “La verdad yo no quería poner el puesto, porque no tenía dinero para comprar todo esto y me daba miedo, pero don Miguel siempre me insistió para que dejara de lavar y planchar”, cuenta.
Entrevista mientras vende sus productos, aseguró que sus jornadas laborales eran muy pesadas, pues regresaba a casa a las 10 de la noche, luego de trapear y lavar ventanas, “y todo el trastero de la cocina, por eso tomé la decisión”.
Con el apoyo del señor y su esposa logró iniciar, pues le brindaron los insumos sin cobrarle en ese momento; luego ella pagó lo que le prestaron; ahora hace bolas de tamarindo de chile y dulce, preparaos de nanche, torito de nanche y maracuyá.
Recordó que la primera venta fue de 500 pesos y algunas personas comenzaron a apoyarla al regalarle vainilla, tamarindo, entre otras cosas, algo que agradecerá por siempre, dijo. “Hace años terminé de pagar lo que me prestaron y bendito al señor, ahora que vendo ya no le debo nada a nadie”, explicó.
Contó que la gente ahora le compra garrafas de nanche, garrafas de maracuyá y bolsitas de tamarindo que vende en 40 pesos. “Tengo el bote de tamarindo que doy en 100 pesos; el litro de nanche 150 pesos y la garrafa está en 350. El litro de miel lo doy en 240, porque está cara la miel, sin embargo, la gente sí me compra, se llevan un litro o dos”, explicó.
Ha tenido dificultades en su vida
Doña Juanita tuvo cinco hijos; dos mujeres y tres hombres y recordó un momento trágico que no supera aún, la muerte de uno de ellos, sin embargo, el dolor que siente trata de ponerlo a un lado para seguir con su vida y atender su noble negocio, además en disfrutar a sus tres nietos.
Reconoció que la zona de Tamarindo es muy tranquila y que hay muchos puestos de venta del mismo producto, sin embargo, dice tiene su clientela que pasa a realizar alguna compra.
“Invitamos a la gente a que pase a comprar algún dulce, saben muy ricos, aquí yo los elaboro; estamos a un lado de la parada de los autobuses TRV que van para Xalapa y estamos cerquita del puente peatonal en la localidad de Tamarindo”.
“Anímense a comprar, la pulpa yo la hago y es gracias a que me enseñó doña Yola; ella tiene un puesto allá abajo; cuando ella me dijo que iba a hacerlo yo, le dije, pero si yo no sé, entonces respondió, que nadie nace sabiendo. Te voy a enseñar, y aprendí; luego la gente de allá abajo me buscaba para que yo les hiciera la pulpa”, contó.
Aunque dijo que no es fácil hacer el producto, “sí cuesta para batirla, porque el tamarindo está cuerudo y hay que batirlo, pero aún así lo hago con mucho gusto para hacer la pulpa de chamoy, de chile y de azúcar”.
La señora el 27 de mayo cumplirá años y aunque no le gusta la fiesta, sus hijos la animan y espera pasar un buen momento rodeada de su familia, “como debe ser, siempre con la familia, porque la familia también es importante para armarse de valor y poner un negocio como lo hice yo”, concluyó.