TOKIO.- La esposa del embajador chino en Japón y la gobernadora de Tokio asistieron a un evento para marcar el debut público esta semana de un popular cachorro de panda en la isla, que acaba de cumplir seis meses.
La saludable bebé panda nació en junio, cinco años luego de que su madre, Shin Shin, perdiera otro osezno apenas días después de su nacimiento. Hace casi tres décadas que un cachorro de panda en el zoológico de Ueno de Tokio no sobrevive este tiempo.
Wang Wan, esposa del embajador chino Cheng Yonghua, se reunió con la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, en un evento mediático un día antes de que el público general pueda conocer a la panda bebé.
Las relaciones entre China y Japón se han visto tensadas con frecuencia por el amargo legado de la Segunda Guerra Mundial y la rivalidad regional, pero los eventos relacionados con la protección de los osos panda a menudo ofrecen oportunidad para establecer acercamientos.
"Este año se cumplen 45 años desde la normalización de las relaciones entre China y Japón. Creo que el nacimiento de Shan Shan -pronunciado Xiang Xiang en chino- es realmente auspicioso", dijo Wang.
El panda bebé, que al nacer cabía en la palma de una mano, ahora pesa alrededor de 12 kilos. Este lunes, los medios pudieron verla mientras masticaba bambú, daba volteretas y escalaba objetos, incluyendo un tocón de árbol.
Shin Shin y su pareja Ri Ri, llegaron a Japón desde China en febrero del 2011 y fueron presentados a los medios poco después de que un devastador terremoto remeciera al país el mes siguiente, a fin de aportar algo de optimismo a una población angustiada.