El árbol emblemático de Xalapa ubicado en la plazuela del Carbón es un anciano y, aunque vientos fuertes no provocarían su caída, sí es un árbol frágil, indica tomografía sónica realizada por científicos de la Red de Viveros de Biodiversidad AC (Revive).
¿Qué más se puede saber de la salud de “el Árbol” de la calle Revolución?
El biólogo Aníbal Ramírez Soto explica que tras evaluación con el “software Arbostat” se puede determinar que tiene una “estabilidad media”.
“Ha sufrido mucho. Presenta un hueco en el centro, no cuenta con raíces de anclaje; le han cortado raíces de los lados. Colocarle una macetera le ha ayudado a tener estabilidad pero se le ha restringido su sistema de raíces a esa macetita”, detalla.
La fragilidad, añade, se da porque no hay raíces grandes y extendidas que le pudieran dar un mayor soporte, ya sea porque estas se pudrieron o porque las cortaron cuando hubo renovación de las calles.
En general, reitera que todavía tiene una resistencia media, no es un árbol en riesgo, sin embargo, requiere la continuidad de los cuidados para su conservación y efectuarle monitoreos semestrales o anuales.
Con la nueva tecnología ya presente en Xalapa, Aníbal Soto ahonda en otros datos: “El Árbol” presenta en su mayoría un tejido en buen estado de salud, un hueco y una parte de tejido en decadencia, no muerto pero sí en el proceso de empezarse a morir”.
“Según la orientación de donde vienen los vientos podemos calcular el tamaño y grosor, así como toda la copa; nos da una idea de la resistencia que va a tener al viento cuando el aire le pegue, dependiendo de si es en la parte más sana o donde está más podrido”.
El fresno traído de Inglaterra a la capital del estado de Veracruz en 1880 “todavía vivirá varios años más, pero su vida útil o su longevidad es de hasta 200 años y ya rebasa los 140; eso quiere decir que ya es un árbol anciano, que va para abajo”.
Algunos de los cuidados brindados como los antifúngicos y fertilizantes no se deben suspender, y cada año se debe verificar qué tanto está creciendo la cavidad interna detectada, indica.
“Es natural su envejecimiento y sí necesita monitoreo, así, cuando se convierta en un riesgo, se le deberá podar, quitar peso o, eventualmente, si representa un daño muy grande en unos ocho o 10 años, se deberán tomar otro tipo de medidas”, señala.
Aníbal Ramírez comparte que los resultados del icónico fresno ya fueron entregados a Medio Ambiente local con el fin de que los especialistas tomen las medidas pertinentes.
A nombre de Revive, la asociación de la cual es fundador, manifiesta el interés por tener una cercanía con la población, que sepa de la existencia de instrumentos, información y organizaciones capaces de proporcionar datos fidedignos para la toma de decisiones con respecto al arbolado.
“Mi sueño es hacer las tomografías de todos los árboles de Xalapa y, como en los países desarrollados, lograr que la infraestructura verde sea tan importante como la gris”, expresa.
En otros países, comenta, hay inventario de los árboles y se conoce el estado en el cual están: “En Revive quisiéramos contribuir a conservar a todos aquellos árboles que todavía tienen buena vida, aportar información para que los árboles buenos duren más y también diagnosticar aquellos ya muertos”.
“Nuestra estrategia a corto, mediano y largo plazo contempla también que árboles en riesgo o en muerte prematura sean retirados para introducir otros árboles nativos de buena calidad para poder reverdecer la ciudad”, anota.
¿Cuál es el árbol más viejo de Xalapa?
El árbol más viejo de la ciudad, una higuera ubicada en el Camino Antiguo a Naolinco, será el próximo árbol a evaluar, adelanta el biólogo, quien llama a la ciudadanía a establecer comunicación.
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Se puede escribir y mandar fotos de árboles a la página electrónica de Revive y al correo electrónico info@revivemx.org.
Convoca además a tomar en cuenta los beneficios de los árboles al medio ambiente, a la sociedad al generar espacios de reunión y socialización y, también, el valor que suman en términos económicos.
“En las ciudades con arbolado se comercializa más y los terrenos tienen más plusvalía. Hay que darle más valor a la ciudad a través de la siembra de árboles”, puntualiza.
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