Ciudad Mendoza, Ver.- Al menos mil 800 ahuehuetes conforman el único bosque de galería en el estado de Veracruz y sobreviven al avance de la mancha urbana y a la contaminación, desde Acultzingo hasta Ixtaczoquitlán, mencionó Roberto Ortega, integrante del Colectivo “Los Viejos del Agua”.
En entrevista dijo que buscan que la Legislatura del Estado nombre este bosque como patrimonio cultural y natural del estado de Veracruz, así como la construcción de un vivero, que ya está funcionando con el nombre “Sembrando gigantes”, donde producen entre 400 y 500 ahuehuetes.
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El lugar adecuado para esta planta, dijo, es sobre los 800 y mil 300 metros sobre el nivel del mar, por lo que esta zona es considerada como ideal para ellos. Para conocer el número exacto de ejemplares que existen, se dan a la tarea se hacer un inventario de todos los que hay en la zona.
Y es que hay presencia de este milenario árbol desde el municipio de Acultzingo hasta Ixtaczoquitlán. En Nogales hay bastantes, así como en Huiloapan, Río Blanco y Orizaba, por eso es que solicitaron al Congreso del Estado nombrar ese bosque como patrimonio cultural y natural del estado, pues es el único que hay.
Mencionó que de acuerdo con un estudio que realizó recientemente un especialista a los individuos que lo conforman, los ahuehuetes que forman el bosque de galería de la zona son relativamente jóvenes -tienen entre 200 y 300 años- y son árboles no plantados sino naturales.
“Pensábamos que eran más viejos porque en toda esta región no había habitantes, empezaron a llegar por el año 1890”, apuntó y enfatizó que estos árboles son parte de la identidad de la región, por ello es que se dan a la tarea de rescatarlos, conservarlos y protegerlos.
Agregó que el estado físico de los mismos no está tan deteriorado, a pesar de que no se les ha cuidado y a que han resistido el embate de la mancha urbana que poco a poco los ha ido alcanzando.
Añadió que en el vivero “Sembrando gigantes” están en producción cerca de 500 ahuehuetes que entregarán cuando hayan cumplido un año o año y medio y alcanzado una altura de 1.40 metros.
Una parte va a servir para reforestar el bosque y otra para sembrar en alguna alameda o parque de esta zona, donde lo soliciten las autoridades, no solo de este municipio sino de la zona conurbada.
¿Los ahuehuetes pueden ser indicadores de la salud de las riberas?
José Carlos Pizaña Soto, director Regional Planicie Costera y Golfo de México de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, dijo que su conservación es importante porque son indicadores de la salud de las riberas, porque están adaptados a vivir a orillas de los ríos con otras especies como los álamos y son hábitat de muchos otros organismos como insectos, anfibios, reptiles, aves.
Incluso son muy importante para mantener la calidad del ecosistema acuático cuando tengan presencia de invertebrados, peces y otras especies, son importantes para mantener los bordes de las riberas, evitar la erosión de los suelos y también para dar sostenimiento a una serie de procesos ecológicos que en otras partes de la cuenca son importantes para las actividades productivas.
“Mantener los bosques de galerías y más en particular el bosque de galería que está en Camerino Z. Mendoza es muy importante porque es el único que hay con estas características en el estado de Veracruz”, remarcó.
Aparte de que forma parte del Cañón del río Blanco que fue establecido en los años 30 para ser uno de los indicadores del provisionamiento de agua para el desarrollo de todo el corredor industrial, desde Orizaba hasta Acultzingo.
Resaltó que las instancias involucradas en el cuidado y conservación del medio ambiente trabajan para encontrar fórmulas de recuperación de la calidad ambiental en el Cañón del Río Blanco y uno de los referentes es el bosque de galerías de este municipio.
Además, el ahuehuete es el árbol nacional, por lo que es de suma importancia su conservación, no solo por los servicios ambientales que da y por lo significativo que es para la cultura mexicana, sino porque ha acompañado al país con toda la biodiversidad que tiene.
Estas plantas existen en el Continente Americano desde mucho antes de que fuera descubierto por los europeos.
¿Cómo es que defienden los suelos?
Leticia Cuevas Flores, delegada de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales del Estado de Veracruz, dijo que este bosque, para el área natural de la cuenca del río Blanco es la parte más preciada, porque no solo representa a los árboles comunes, sino que son colosos defensores de los suelos.
Refirió que los suelos donde hay ahuehuetes tienen un Ph ácido, es decir, que no son aptos para la agricultura, son ecosistemas especiales que representan un amplio corredor biológico de flora y fauna que alberga especies in situ y son fuentes de alimento en época de seca; regulan el clima, son los que más sufren.
El río Blanco no está saludable, sufre por la gran cantidad de bacterias que hay, la Conagua ha hecho estudios en ese cuerpo de agua y tiene un cúmulo de bacterias ocasionadas por las descargas de desechos urbanos.
Para ello se requiere hacer investigación de este gran ecosistema que se tiene que proteger y cuidar porque es una barrera natural que a su vez protege a la población del cambio climático, porque regulan la temperatura.
Garantizar que se conserven estas áreas naturales depende de todos, y un primer paso para hacerlo es generar conciencia entre la población.
¿Cuándo se realizará el Quinto Festival del Ahuehuete?
Elia Núñez Barbosa, integrante del Colectivo “Los Viejos del Agua” destacó que mediante el acercamiento de manifestaciones artísticas y acciones que buscan mejoras en la vida silvestre, se dan a la tarea de fortalecer y también promocionar el único bosque de ahuehuetes del estado.
El Quinto Festival del Ahuehuete es la ocasión ideal para realizar diversas actividades, que no solo se llevarán a cabo en este municipio, sino que se incorporan también Acultzingo, Huiloapan, Rio Blanco e Ixtaczoquitlán.
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El festival comenzó el jueves 17 con la exposición “Colosos del Agua” en la planta baja del Palacio de esta ciudad, a las 18 horas. El viernes 18 se realizó el conversatorio “Los ahuehuetes: esos gigantes de la región”, con la participación de Alejandro Sánchez Vélez, presidente de la Asociación Mexicana del Ahuehuete; Jorge Alejandre Rosas.
En él abordaron los temas: “Servicios ambientales y biorremediación por los bosques de galería" y “El bosque ripario de Ciudad Mendoza: un patrimonio cultural”.
Osvaldo Balderas San Miguel dará la ponencia: “Conociendo las aves del parque de ahuehuetes del Cañón del Rio Blanco” y Gisela Campos Ángeles hablará sobre “El árbol del Tule, el gran maestro”.
El sábado 19 habrá un observatorio de aves coordinado por Luciana Santos Martínez, Osvaldo Balderas y Oscar Cid Mora; el punto de reunión para esta actividad será la gasolinera del Rincón de las Doncellas, a las a las 9:00 horas.
Ese mismo día se realizará una conferencia con Carlos Serrano Sánchez, en el Palacio Municipal de Acultzingo a las 11:00 horas, así como el foro: “Santa Rosa de mis recuerdos”, con la participación Bertha Rodríguez Báez, Jesús Samuel Vargas Vásquez, Enrico García Martínez y Enrique Rojas Carrera, a las 17:00 horas en la Casa de Cultura de Ciudad Mendoza.
¿Qué más necesitas saber de los ahuehuetes?
A este árbol se le llama “viejos del agua” porque la palabra que proviene del náhuatl (ahuet) significa agua y (huehuet), viejo, por ello se traduce así; aparte de que normalmente se encuentra muy cerca de los ríos y lagunas.
Los servicios ecosistémicos que produce el ahuehuete son muy importantes. En algunas partes los reconocen como plantas de tratamiento porque absorben los materiales pesados del agua y los limpian, limpian los ríos.
A pesar de que crecen cerca de los cuerpos de agua, los hay también en las zonas urbanas. Muestra de ello son los cinco que están dentro de la que fue la fábrica Civsa, que fueron plantados en 1905 y donde está en frontón hay otro que fue plantado en 1920, aproximadamente.
El Colectivo “Los Viejos del Agua” está integrado por la Casa de Cultura de Ciudad Mendoza, artistas plásticos y catedráticos de las facultades de Ciencias Químicas y Ciencias Biológicas de la Universidad Veracruzana. Trabaja desde hace más de 10 años en el rescate y conservación de estos milenarios árboles.
Nota publicada en El Sol de Orizaba