Queda solo 1 por ciento del bosque mesófilo de Veracruz y del país, expone Ana Isabel Suárez Guerrero, profesora de las facultades de Biología y Ciencias Agrícolas de la Universidad Veracruzana.
Subraya que este ecosistema se ha deteriorado en las últimas décadas, pese a que posee el mayor número de especies endémicas, por ello, debería ser una prioridad protegerlo.
Entrevistada, en la Facultad de Biología de la UV, la doctora Ana Isabel Suárez explica que es urgente preservar lo que queda de este ecosistema que es vital para mantener a la fauna que solo se puede hallar en ese entorno y que ahora está en grave riesgo.
Indica que precisamente las variedades de animales que habitan en el bosque mesófilo son las que están en mayor riesgo.
Coyotes en el bosque mesófilo
En el caso de los coyotes, menciona que son animales que tienen una mayor adaptación a numerosos tipos de vegetación, pero lo cierto es que estos animales pueden hallar un buen entorno para vivir en este ecosistema.
Si de verdad se encontrara un coyote en la zona del bosque del Cerro de la Galaxia, expone, sería muy importante protegerlo. “Hay que recordar que son depredadores y su labor es mantener a poblaciones de plagas a raya, significa, que tienen un papel importante en el medioambiente”.
Explica que lo que sería peligroso es que hubiera una gran cantidad de coyotes, porque representan un riesgo. “Es obvio que los atacan porque es un depredador, pero son parte vital de los ecosistemas”.
Remarca que los coyotes no son una especie endémica del bosque mesófilo, pero, sin duda, es un entorno que vale la pena conservar.
Características del bosque mesófilo
Este bosque es especial porque posee elementos de clima cálido y templado que se mezclan a una altitud de alrededor de mil 800 y 2 mil metros de altura. Además tiene que estar orientado en una dirección donde llegue la humedad de los vientos y atmosférica.
Apunta que es por ello que en Xalapa no hay manera de tener un salero seco porque la humedad atmosférica es alta. Eso favorece el crecimiento de infinidad de especies que solo crecen en este lugar que tiene condiciones únicas y, por ello, es tan especial. Por eso no lo hay en todo el país.