Entre el constante golpeteo que Andrés Manuel López Obrador y Ricardo Anaya sostuvieron en el segundo debate presidencial una frase se ganó la memoria de los mexicanos.
"Ricky Riquín Canallín" fue el calificativo que López Obrador le dio a Anaya para evadir la pregunta del panista que le cuestionó sobre los estudios en el extranjeros del hijo del morenista.
"Ricky Riquín... Canallín... No tiene nada que ver lo de mi hijo con que tu hayas mantenido en Atlanta", le dijo AMLO y de inmediato las redes hicieron lo suyo: