Leyendas de Orizaba: la misteriosa voz en la piedra gigante

¿Alguna vez has visitado el cementerio municipal “Juan de la Luz Enríquez”? debes saber que ahí se encuentra uno de los mejores tesoros de la arqueología veracruzana

Edgar Reyes | Diario de Xalapa

  · lunes 7 de febrero de 2022

¿Alguna vez has visitado el cementerio municipal “Juan de la Luz Enríquez”? Ahí se encuentra la piedra del gigante / Foto: Miguel Castillo | El Sol de Orizaba

Si radicas en Orizaba o alguna vez has visitado el cementerio municipal Juan de la Luz Enríquez” debes saber que ahí se encuentra uno de los mejores tesoros de la arqueología veracruzana, la piedra del gigante, pues en medio de las tumbas se observa un enorme monolito que registra el grabado de lo que fue al parecer un hombre muerto de gran estatura. Esta gran piedra es conocida por los lugareños como “La Piedra del Gigante”.

Algunos historiadores han afirmado que esta piedra es inclusive más antigua que la ciudad de Orizaba, por ello según estimaciones de expertos la piedra es resultado de la última erupción del Citlaltépetl (Pico de Orizaba), la montaña más alta de México. Por ello se tiene registro que dicha piedra data de entre los años 1300 a 1500 de nuestra era.

¿Cuánto mide la piedra del gigante?

El monolito tiene 8 metros de largo por 6 de ancho y metro y medio metro de altura. Constituye el primer documento histórico sobre la región de las Altas Montañas, pues es sabido que la historia comienza a contarse a partir de la aparición de la escritura en la piedra.

Especialistas en el tema consideran que los dibujos grabados que muestra en su superficie, fueron realizados por los antiguos hablantes del Ahuilizapan (Orizaba), para conmemorar, el ascenso del “Huey Tlatoani de Tenochtitlan, Moctezuma Xocoyotzin” en 1502.

¿Por qué es tan especial la piedra del gigante?

Cabe destacar que a pesar de la gran erosión que la gran roca presente por el paso del tiempo, aún es posible observar a simple vista algunos elementos, como lo es el gigante, dos animales de menor tamaño. De acuerdo a las placas instaladas en el lugar las explicaciones de estas grabaciones son las siguientes:

“Tres elementos apuntan hacia la representación de un rito agrario por los inicios de primavera, se observa un conejo y un pez acompañados de círculos que indican Año 10 (Tochtli) y día dos (Ciáctli)”. La posición del cuerpo señala el punto donde nace el sol, sobre el cerro de Chicahuaxtla, en el 21 de marzo, equinoccio de primavera. Lo que indica que se celebraba la ceremonia de Tlacaxipehualiztli, edificada a Xipe Totec, mientras que en las paredes las imágenes de los escudos aluden a la guerra y dos mascarones de un Dios con anteojeras y largos colmillos (Tláloc)”.

El monolito (la piedra del gigante) tiene 8 metros de largo por 6 de ancho y metro y medio metro de altura / Foto: Miguel Castillo | El Sol de Orizaba

Cabe mencionar que el cerro de Chicahuaxtla es una cumbre cuya cima se eleva mil 400 metros sobre el nivel del mar y que se ubica en el municipio de Fortín de las Flores, muy cerca de Orizaba y Córdoba.

En cuanto a Xipe Totec se trata de una de las deidades más antiguas de Mesoamérica y su nombre significa, “nuestro señor el desollado”. Rige el punto cardinal de oeste, donde se oculta el sol y representa la fertilidad y la regeneración de la piel en las personas. Por ello se le consideraba el encargado de volver fértil al suelo seco.

¿Qué hacían para atraer la lluvia en tiempo de cosechas?

Hay que mencionar que resulta curioso como los antiguos pobladores de la región de las Altas Montañas creían que Xipe Totec utilizada un instrumento musical de percusión llamado chicahuaztli, el cual era un bastón que en la parte superior se colocaba una esfera de bronce con semillas o pedazos de metal, y su función básica era como sonaja. Xipe Totec usaba este instrumento para llamar a los rayos los cuales daban inició a la temporada de lluvias.

Es importante mencionar que algunos historiadores hacen referencia a Tlaloc como el hombre alto que está debajo de la gran piedra del gigante / Foto: Miguel Castillo | El Sol de Orizaba

Es importante mencionar que algunos historiadores hacen referencia a Tlaloc como el hombre alto que está debajo de esa gran piedra, pues también era una deidad ligada con la fertilidad y su nombre Náhuatl significa “Néctar de la Tierra”.


¿Qué dice la placa en la piedra del gigante dentro del cementerio?

La placa sigue en el lugar y dice: Las primeras conjeturas acerca de la piedra del gigante se refieren a leyendas que hablan de gigantes. La figura principal es un personaje de cinco metros de altura que yace derribado, con el rostro descarnado (Xite Topec) y el cuero cabelludo desprendido, el vientre abierto con los intestinos de fuera, los brazos en forma de cruz y una hendidura que a manera de media luna cruza su pecho, además de que su pie izquierdo se encuentra atado con cuerdas, simulando una escalera.

A pesar de la gran erosión que la gran roca presente por el paso del tiempo, aún es posible observar a simple vista algunos elementos, como lo es el gigante, dos animales de menor tamaño / Foto: Miguel Castillo | El Sol de Orizaba

Para otros historiadores resulta más interesante el tamaño de la piedra, que les recuerda al temalácatl o piedra del sacrificio gladiatorio, donde ataban de la pierna izquierda, con cuerdas en forma de escalera, a los cautivos que abrían de participar en una contienda desigual en honor a Xipe Topec.

Por ello esta gran piedra tenía un asa en el centro, de la cual se atapa a un prisionero de la pierna y estaba condenado a realizar diversos combates gladiatorios. Lo que significa que el prisionero era amarrado con sogas a esa inmensa piedra y con esta clara desventaja, tenía que pelear a muerte con otros guerreros que estaban fuertemente armados.

Esto entre los mexicas era considerado una ceremonia ritual en honor a Xipe Totec, era algo así como una ceremonia agrícola con fines de fertilidad para la tierra.

Para los orizabeños la piedra del gigante es de gran importancia inclusive algunos historiadores aseguran que fue visitada por Hernán Cortes y su inseparable Malinche.

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Por ello si eres nativo de Orizaba debes conocer la piedra del gigante y su historia, pero si eres foráneo y visitas este pueblo mágico, sin duda alguna es un lugar que no debes pasar por alto y visitar para constatar con tus propios ojos que ahí sigue esta gran piedra que guarda un sinfín de secretos.

Así luce actualmente la piedra del gigante / Foto: Miguel Castillo | El Sol de Orizaba