El calor extremo que se ha presentado en las últimas semanas persiste a pesar de que desde el pasado 15 de mayo entramos oficialmente en la temporada de lluvias, lo sabemos, en Veracruz no se han presentado tormentas ni granizadas como en Ciudad de México o Puebla pero usuarios se preguntan cómo mantener fresco el ambiente, principalmente en el hogar.
Aunque muchas personas encuentran alivio en la colocación de aires acondicionados, ventiladores o humidificadores lo cierto es que eso consume mayores cantidades de energía por lo que recurrir a métodos más naturales podría ser de gran utilidad, un ejemplo es la adquisición de plantas que mantengan fresca tu casa o conocer los horarios precisos para abrir tus ventanas y no dejar que el calor entre y caliente las habitaciones.
Existe un método para el que se necesitan vasijas de barro, se conoce como “efecto botijo”. Aunque nuestros antepasados lo usaban, los estudios científicos aplicados a esta técnica son relativamente recientes, explica la Universidad Pública de Navarra (UPNA) en España. Se trata de un efecto de refrigeración por evaporación, es decir que a mayor temperatura exterior habrá más reacción de evaporación del agua.
¿Qué es el efecto botijo?
Fue en 1990, cuando dos profesores de la Escuela de Ingeniería Industrial de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), dieron con la fórmula matemática; la técnica permite “sudar” a la vasija y las pequeñas gotas de agua se filtran al exterior, estas se evaporan al convertir en energía el calor que hay dentro del recipiente y la temperatura interna disminuye manteniendo fría el agua depositada allí.
Dicho de otro modo y para que puedas usar el método en tu propia casa refrescando el interior de tus habitaciones, la aplicación de esta teoría se basa en la evaporación del agua a través de la porosidad del barro.
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“El grado de enfriamiento dependerá de factores como la cantidad de agua contenida en el botijo y de las condiciones ambientales. Este proceso térmico, cumple una función muy similar a la que realiza el sudor en nuestro organismo para reducir la temperatura corporal” explican expertos.
¿Sabías que en la antigüedad enfriaban el aire de las casas con recipientes de barro llenos de agua? Esto podía reducir hasta 10 grados la temperatura en el ambiente.
Necesitas una vasija natural sin esmaltar; cuando el agua se evapora, extrae calor del ambiente enfriando el aire circundante. Si colocas varios cántaros o vasijas llenos de agua en diferentes áreas de tu casa podrás garantizar un ambiente más fresco sin necesidad de aire acondicionado.
Refrigerador ecológico con vasijas de barro
Este método lo han aplicado incluso en la arquitectura moderna y hay quienes hacen de ello un refrigerador ecológico que puede mantener lo alimentos en “refrigeración” hasta 8°C, para ello se requiere de dos vasijas de diferente tamaño para que una pueda introducirse dentro de la otra y en el espacio sobrante se debe colocar arena.
Sobre esa arena se coloca agua hasta que se humedezca por completo mientras colocas en la vasija pequeña los alimentos a enfriar, se cubre con un trapo húmedo y por curioso que pareja si está expuesto al Sol funciona mucho mejor.
Puede almacenar bebidas, alimentos o medicamentos y solo se requiere agua para que comience a enfriar.
El origen del botijo es aún impreciso ya que este recipiente, al igual que otros objetos de arcilla cuenta con miles de años de historia. Historiadores opinan que se remonta a la Mesopotamia de hace unos 5 mil 500 años, cuando se empezaron a desarrollar las primeras técnicas de cocción del barro.
¿Utilizarías este método para enfriar tu casa?