Boca del Río, Ver.- La publirrelacionista e influencer, María Fernanda Pacheco González, sobreviviente de cáncer de Hodgkin, afirma que el amor y el cariño es una gran medicina para las mujeres que enfrentan esta enfermedad.
Al ofrecer una conferencia por el mes de la mujer en la ciudad de Boca del Río, la mujer de 37 años de edad, narró cómo enfrentó esta enfermedad que no es sinónimo de muerte, sino una oportunidad de salir adelante y volverse más fuerte.
Al compartir su experiencia, habló de la clave, que es la detección oportuna y someterse a los tratamientos médicos, pero también de los factores que la hicieron no rendirse jamás.
¿Cómo fue la experiencia de Mafer con el cáncer de Hodgkin?
Recuerda que hace seis meses le informaron que tenía cáncer de Hodgkin y que se encontraba en etapa 4, que es la más avanzada; sin embargo, asegura que nunca pensó en la muerte.
“Yo empecé con un dolor de espalda que después se pasó a la parte de enfrente en el estómago, fui con un médico en general, un gastroenterólogo, me hice 50 mil masajes y en una de mis clases de pilates, grabando mi video me vi una bola enorme, se lo enseñe a mis amigas y una de ellas envío mi foto a su ginecólogo y le dijo esto lo tiene que ver un especialista”.
“Fui a ver a oncólogo y me dijo Mafer es cáncer y te lo dicen tan de repente, pero me dijo te vamos a ser una biopsia para saber qué tipo de linfoma y a los cuatro días me lo confirman y me dice que lo tenía que ver con un hematólogo, lo veo y me dice que estaba en fase cuatro. El doctor me dijo las quimios van a ser leves y no se te caerá el pelo, pero no, fueron de las más fuertes, lo importante fue la manera en que me abordó el problema”, admite.
En su caso, señala que inicia su tratamiento el 8 de marzo del año pasado y después de seis meses, los médicos le avisaron que el cáncer había cedido, a pesar de las complicaciones que presentaba.
“Yo prácticamente tenía todos los ganglios inflamados del cuerpo, tenía una masa tumoral de 14 centímetros en la espalda, tenía 10 kilos abajo, yo llegué a pesar 44 kilos, no tenía músculo, no tenía nada y estaba muy mal, sino hubiera ido al hospital en ese momento, probablemente hubiera muerto”.
“En septiembre del 2023, fue un 26 de septiembre, ahí me dijeron que ya no tenía la masa tumoral y que ya mi cuerpo se encontraba libre de esta actividad metabólica que era síntoma de cáncer”, platica.
Si bien dijo que la atención fue importante, también la inspiración que encontró de seres queridos y el amor propio para continuar con esa lucha de una enfermedad que en muchos casos es vista como mortal. Sin embargo, reflexiona y afirma que es importante romper con el estigma de que cáncer es sinónimo de muerte.
“Hay muchos tipos de cáncer, hay muchos tipos de diagnóstico, hay muchos tipos de tratamientos, cáncer no es igual a muerte, cáncer es un mensaje a que hay mucho que aprender”, comentó.