Mario Herrera Lozano, neurocirujano y especialista en diagnóstico de epilepsia y cefalea, destaca la necesidad de divulgar la importancia del cuidado del cerebro, pues al menos el 13 por ciento de las causas de las enfermedades y daños actuales están relacionadas con este órgano.
¿Qué enfermedades se relacionan con el cerebro?
Migraña, accidentes cerebrovasculares y enfermedades neurodegenerativas son algunas de las más comunes que el médico nombra en el marco del Día Internacional del Cerebro, el cual se conmemora el 22 de julio a nivel mundial.
Subraya también que ante el incremento de accidentes, el traumatismo craneoencefálico es la primera causa de muerte por accidentes y discapacidad en niños, adolescentes y jóvenes.
Entre la población actual, afirma, hay un incipiente interés por saber sobre los problemas neurológicos y, aunque en apariencia crece la inquietud por los trastornos mentales, opina que generalmente son silenciados y subestimados.
¿Qué son las enfermedades neurodegenerativas?
Al ahondar en las enfermedades neurodegenerativas, descritas como aquellas que afectan el sistema nervioso central, con pérdida neuronal progresiva, el profesional de la salud detalla que la más frecuente y con más prevalencia es el Alzheimer, pero hay muchas otras con consecuencias a distintos niveles.
“Al afectar el nivel cognitivo, motor, funcional y social, las neurodegenerativas son enfermedades que la sociedad tiende a relacionar con la vejez, pero cada vez hay más evidencia científica de que pueden influir factores como las condiciones ambientales y hasta los mismos mapas genéticos, y entonces la edad no importa”, declara.
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Los problemas en el cerebro, lamenta, no tienen edad. Ejemplifica con la parálisis cerebral infantil y el daño cerebral, que a nivel mundial son las causas más comunes de discapacidad en la infancia.
Los daños cerebrales en infantes, explica, son en su mayoría por traumatismo craneoencefálico, ictus, epilepsia, tumores cerebrales, encefalitis o por origen genético.
Menciona también que ante el aumento de accidentes de distinto tipo, hay un incremento en personas con traumatismo craneoencefálico, quienes suelen derivar en procesos de coma y alteraciones de la conciencia.
¿Cómo se pueden prevenir las enfermedades neurológicas y daños al cerebro?
El especialista dice que hay enfermedades raras de las cuales poco se sabe; ante ello, exhorta al Estado y al sistema de salud a destinar mayores recursos para la investigación. En Veracruz, se refiere específicamente a la ataxia espinocerebelosa tipo 7.
Antes de sus recomendaciones, enumera los factores que afectan la capacidad intelectual: dormir poco, consumir alcohol y tabaco, estrés, comida “chatarra”, algunos medicamentos y la deshidratación.
Las recomendaciones para cuidar el cerebro son realizar actividad física, seguir una dieta sana y equilibrada (en la medida de las condiciones económicas individuales), y consumir ácidos grasos como el Omega 3 y Omega 6, presentes en semillas, frutos secos y pescados.
También, hacer lo posible para llevar una vida tranquila; la tensión afecta el hipocampo y otras áreas de la memoria, señala.
Socializar, convivir con amistades y familiares queridos, pensar, reflexionar, jugar ajedrez, rompecabezas y memoramas son otras de las sugerencias, además de usar la lógica para evitar el deterioro cognitivo.
Exhorta a motociclistas, conductores de autos y quienes caminan de manera distraída o con el celular y audífonos, tomen conciencia de la importancia de extremar cuidados para evitar caídas y accidentes.
No usar sustancias tóxicas es otra de las recomendaciones, así como controlar emociones que puedan derivar en ira, juegos bruscos, golpes o empujones que lleguen a lesiones intracerebrales.
Apunta que aunque puede haber lesiones leves, otras pueden llevar a la muerte. Reitera que el traumatismo craneoencefálico es uno de los mayores problemas de salud pública.
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Relación entre el cerebro y el intestino
¿Por qué llevar una dieta sana es importante? Guiomar Melgar y Dolores Hernández, investigadores del Instituto de Ciencias Básicas de la Universidad Veracruzana, llaman a informarse y saber que la relación entre el cerebro y el intestino es crucial para la salud digestiva y mental.
“La estabilidad de nuestra psique depende en gran medida de una microbiota sana… En el intestino se encuentra el 40 por ciento de las neuronas del organismo, por eso se le llama el segundo cerebro”.
En información generada para la revista La Ciencia, que dedica su más reciente número al cerebro, enfatizan en la importancia de la microbiota (millones de bacterias que viven en el intestino); para que esté bien y haga el papel que le corresponde en su relación con el cerebro, es fundamental una buena dieta con frutas y verduras.
Anotan que en la calidad de la microbiota influye negativamente el exceso de antibióticos, así como analgésicos y anti-inflamatorios; no hay que automedicarse.
“En definitiva, nuestra salud digestiva depende de nuestra salud mental y viceversa. Para mejorar nuestra salud mental debemos aprender a cuidar nuestra microbiota porque de ella depende cómo nos sentimos”, subrayan.
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Datos curiosos del cerebro
Los científicos consideran que algunos datos que la mayoría de la población no conoce es que el cerebro no es un músculo sino un órgano complejo; al ser el centro del sistema nervioso humano, controla y regula la mayoría de las funciones del cuerpo y de la mente.
Además, un cerebro adulto pesa un kilo 300 gramos, aproximadamente, y está formado por cerca de 100 billones de neuronas; se estima que el 60 por ciento del cerebro es grasa.
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