El síndrome de desgaste ocupacional, también conocido como síndrome de quemarse por el trabajo o burnout, se caracteriza por el agotamiento extremo derivado del desempeño laboral. Esta enfermedad está incluida en la tabla de enfermedades laborales, lo que permite reconocer los padecimientos que afectan el bienestar y la productividad de los trabajadores.
Entre 2018 y abril de 2024, se registraron 78 egresos hospitalarios en el sistema estatal de salud de Veracruz debido a trastornos asociados con el estrés grave y de adaptación. Este dato ilustra la creciente preocupación por el síndrome de desgaste ocupacional, comúnmente conocido como burnout.
El nuevo Catálogo de las Cédulas para la Valuación de las Enfermedades de Trabajo, publicado por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 30 de abril de 2024, incluye dentro del grupo de trastornos mentales los asociados con el estrés (grave y de adaptación), reconociendo al síndrome de burnout como una consecuencia del estrés laboral crónico que no se ha manejado con éxito.
La aplicación de este nuevo catálogo permitirá disponer de datos precisos sobre las personas afectadas por el síndrome de burnout en el país.
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Las características del Síndrome de Burnout
Según el nuevo Catálogo de las Cédulas para la Valuación de las Enfermedades de Trabajo, el síndrome de burnout se caracteriza por tres dimensiones principales:
- Agotamiento físico y psíquico (sentimientos de falta de energía y desgaste mental)
- Despersonalización y el cinismo (actitudes negativas y cínicas hacia el trabajo y las personas)
- Falta de realización personal (sensación de ineficacia y pérdida de interés en el trabajo)
Para diagnosticar este síndrome, deben estar presentes altos niveles de agotamiento, despersonalización y baja realización personal.
¿A quiénes afecta el síndrome de burnout?
Este síndrome afecta principalmente a trabajadores cuya labor implica interactuar con otras personas, como aquellos en servicios de atención al público y usuarios.
Los trabajadores deben estar expuestos a alguno de los factores desencadenantes durante al menos tres meses. Además, su aplicación se limita al contexto laboral y no debe utilizarse para describir experiencias en otras áreas de la vida.
Síntomas y consecuencias del burnout
El burnout puede manifestarse de diversas formas, incluyendo alteraciones psicosomáticas, tales como cefalea, fatiga crónica, taquicardia, hipertensión, problemas gastrointestinales, mialgias, exacerbación del asma y trastornos del sueño.
También puede provocar alteraciones cognitivas y del estado de ánimo, como dificultades para tomar decisiones, reducción de la concentración, pérdida de interés, baja autoestima y sentimientos de frustración y fracaso laboral.
Además, las alteraciones conductuales incluyen alta despersonalización, comportamiento deshumanizado, ausentismo, descuido personal, conductas temerarias, adicciones y disminución de la productividad.
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Factores causantes del burnout
El burnout es una enfermedad psicosocial influenciada por factores laborales, organizacionales y personales.
De acuerdo con la compañía Buk, especializada en la gestión de personas y entornos laborales, entre los factores que podrían causar el síndrome de burnout, o esa sensación de “fuego por dentro” al borde de la explosión, se encuentran el mal ambiente laboral y las jefaturas que supervisan constantemente a los trabajadores sin proporcionar retroalimentación, solo esperando que cumplan con sus tareas.
Además, la falta de claridad en el rol y la falta de control sobre el trabajo son algunos de los factores que también podrían estar contribuyendo al burnout en las personas.
Datos y estadísticas del burnout
Aunque el síndrome de burnout se describió por primera vez en la década de 1970, fue reconocido como un padecimiento oficial por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2022.
Según la OMS, cada año se pierden cerca de 12 millones de días de trabajo debido a la depresión y la ansiedad.
En México, el 75 por ciento de los trabajadores sufren de fatiga por estrés laboral, y más del 40 por ciento de los trabajadores de oficina se sienten exhaustos.
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Recomendaciones para prevenir el burnout
Para prevenir el burnout, se recomienda buscar ayuda profesional y compartir inquietudes y emociones con amigos y familiares. También es importante establecer límites, lo que permite definir horarios de trabajo y aprender a decir “no” a tareas excesivas.
Para las personas a cargo de equipos, se recomienda promover un buen ambiente laboral, fomentar la confianza y el trabajo en equipo, y estar alerta a agresiones o malos tratos.
En el ámbito del autocuidado, se sugiere realizar actividades de relajación, como practicar yoga o mindfulness, hacer deporte y dormir bien.
