En ciudades como Xalapa, donde cada vez hay más ruido, especialistas recomiendan a la población mayor de 50 años realizarse estudios preventivos para cuidar el oído.
¿Qué padecimientos aumentan en personas con problemas auditivos?
El otólogo Israel Alejandro Espinosa Rey, advierte que las personas con problemas de audición tienen un mayor riesgo de sufrir deterioro cognitivo y demencia en comparación con aquellas con audición saludable.
En entrevista, explica que cuando la demencia y la sordera se manifiestan simultáneamente, las dificultades para desenvolverse en su entorno y la incapacidad de interacción social aumentan significativamente.
¿Cómo prevenir los problemas auditivos?
Puntualiza que existe un envejecimiento normal y esperado, con el cual la audición se empieza a deteriorar. Por ello la indicación es hacerse audiometrías periódicas después de los 50 años, cada tres o cuatro años, y después de los 70, cada dos años.
La sugerencia se amplía a quienes, más allá de la edad, son población vulnerable al estar expuesta a factores de riesgo. Nombra el vivir en ciudades con mucho ruido o los trabajos como fábricas, aeropuertos, etc., o si se emplean dispositivos a altos volúmenes, como los audífonos. A estas personas les sugiere hacerse audiometría una vez al año.
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¿Qué es la audición?
La audición, le recuerda a la población, es uno de los cinco sentidos mediante el cual le llega un alto porcentaje de información al cerebro para el desenvolvimiento del ser humano.
“La audición está involucrada en procesos neurológicos y procesos cognitivos muy elevados que nos permiten desarrollarnos como seres humanos; cuando empezamos a tener una pérdida auditiva y no nos damos cuenta, esta puede ir aumentando con el paso del tiempo y podemos empezar a perder ciertas habilidades cognitivas que con el paso del tiempo nos pueden llevar a tener deterioros mayores”, enfatiza.
En personas a quienes se les tiene que hablar más fuerte, más claro o que se puede ver en su rostro que hacen un esfuerzo mayor, la pérdida auditiva ya está más avanzada y no deben perder tiempo para la atención, indica.
¿Qué recomendaciones hay para que los jóvenes cuiden su audición?
En cuanto a la población joven, menciona que hay una tendencia a ver muy lejos estos problemas, pero como la pirámide poblacional está cambiando y este grupo etario está más expuesto a muchos factores de riesgos para tener pérdidas auditivas, la convocatoria es a cuidarse y evitar la exposición a altos volúmenes.
“Cuando la pirámide se invierta definitivamente tendremos muchas más personas mayores y estas tendrán un alto índice de posibilidad de poder tener alguna discapacidad auditiva, que actualmente es la tercera en el país”, enfatiza.
En la actualidad prácticamente el cien por ciento de los problemas auditivos, leves o graves, son corregibles, mediante el uso de un auxiliar auditivo, un tratamiento farmacológico adecuado, una cirugía o un dispositivo implantable, dice.
En cuanto a los cuidados, explica que además de evitar la exposición al ruido y tener una adecuada protección auditiva, se deben evitar los medicamentos ototóxicos.
¿Cuáles son los especialistas en salud auditiva?
Menciona además la importancia de acudir con especialistas: en audiología, que se encargan de la evaluación, diagnóstico y rehabilitación auditiva, principalmente a través de auxiliares auditivos, y la otorrinolaringología para hacer los diferentes procedimientos quirúrgicos y mejorar la audición.
¿Cuáles son las alertas de los problemas auditivos?
Convoca a quienes ya tienen algún mareo, zumbido o vértigo, no esperar a que el problema avance. Apunta que cada vez hay más especialistas en el país. En su caso, atiende en la Ciudad de México y su contacto es el 55 62 65 43 33.
Consecuencias de los problemas auditivos
El otólogo forma parte del equipo de MED-EL, líder en soluciones auditivas, que detalla las consecuencias de la pérdida auditiva.
- Aislamiento social: la sordera suele dificultar la comunicación, lo que a su vez lleva al aislamiento; esta falta de interacción es un factor de riesgo para el deterioro cognitivo.
- Disminución del estímulo auditivo: la hipoacusia disminuye la cantidad de estímulos auditivos que llegan al cerebro. Menos estímulo implica menor actividad cerebral en las áreas relacionadas con el procesamiento de sonidos y el lenguaje.
- Aumento de la carga cognitiva: las personas con sordera deben esforzarse más para entender el habla, lo que puede llegar a desviar recursos cognitivos de otras funciones mentales y afectar negativamente la memoria y el razonamiento.
Al respecto, la audióloga Dulce María García Jacuinde reitera que los primeros indicios de sordera pueden ser simples, como la incapacidad para escuchar sonidos comunes como una alarma o un timbre.
“Esta afección generalmente involucra a ambos oídos y al ser un proceso gradual, muchas personas no se percatan que han perdido parte de su capacidad auditiva”.
Al citar un estudio de MED-EL, informa que en México, el 36 por ciento de las personas mayores de 55 años nunca se han sometido a una prueba de audición, a pesar de que la probabilidad de padecer hipoacusia aumenta con la edad.
Comparte datos del Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores, los cuales indican que aproximadamente uno de cada tres adultos de entre 65 y 74 años experimenta algún grado de pérdida auditiva, mientras que casi la mitad de las personas mayores de 75 años en México enfrentan dificultades para oír.
Reitera que la detección temprana de la pérdida auditiva es crucial en todas las etapas de la vida. Para saber más del tema se sugiere visitar www.volveraescuchar.com.