Ante el aumento de problemas auditivos por uso inadecuado de audífonos, ruido cotidiano o de trabajo, la audióloga Catalina Bulla exhorta a la población mayor de 20 años a hacerse un chequeo anual.
En entrevista advierte que la exposición al ruido pone a las personas en riesgo de trauma acústico agudo o crónico. El primero se puede desarrollar por ruido extremadamente alto en un solo evento, mientras el crónico, por exposición continua a ruidos fuertes durante un periodo prolongado.
¿Cuáles son los síntomas de un trauma acústico?
Detalla que los síntomas del trauma acústico son la pérdida auditiva repentina, temporal o permanente, lo cual dependerá de la gravedad del daño. También nombra el zumbido en los oídos, constante o intermitente, y el dolor o sensibilidad en uno o ambos oídos.
Falta una cultura de la prevención, sostiene la especialista, quien llama a la población a dar tiempo de descanso a los oídos. Entre las recomendaciones está el uso no prolongado de audífonos.
Máximo tienen que ser dos horas al día, con volumen moderado, y con descansos. Estos descansos pueden ser con los audífonos puestos, sin música, ya sea en el traslado de un lugar a otro, en la oficina o en cualquier centro laboral.
En sitios donde hay ruido, sugiere también el uso de auriculares como protectores, no para reproducir sonidos. Enfatiza que escuchar música a más de 80 decibeles en antros o convivencias sociales son un factor de riesgo para la salud auditiva.
Catalina Bulla detalla que si las personas se hacen un chequeo anual es posible detectar si hay pérdida auditiva, realizar diagnóstico e iniciar la rehabilitación, algo que ya no se puede hacer con personas mayores de 60 años.
Subraya la necesidad de que la gente sepa que los estudios no son dolorosos y que cada vez hay más lugares a los cuales recurrir. La especialista convoca a conocer a GAES México, empresa que congrega a distintos especialistas de esta área y consultar su página electrónica.
A partir del resultado, dice, se ayuda a las personas a mejorar su audición con las soluciones más adecuadas a partir de las audiometrías y del diagnóstico médico, en colaboración con especialistas en otorrinolaringología.