Ante el aumento de la presencia de mosquitos debido a la temporada de lluvias, hay riesgo de contraer dengue, zika o chikungunya, tres enfermedades que son trasmitidas por el mosco Aedes aegypti.
Hasta el momento, las autoridades sanitarias han indicado que no existe una vacuna que proteja contra estos virus que ocasionan malestares como fiebre, dolor de huesos, erupción en la piel, náusea, vómito, insomnio, y, en casos de graves, de no recibir atención médica, puede llevar a la muerte.
Por ello además de las medidas de higiene que se recomiendan, como mantener los patios limpios y sin cacharros donde pueda almacenarse el agua de lluvia, también se puede proteger a la familia de las picaduras de los mosquitos usando repelentes.
¿Cuántos tipos de repelentes existen contra los mosquitos?
Existen dos tipos de repelentes, químicos y naturales, vienen en diversas presentaciones. En el caso de los repelentes químicos es necesario seguir los consejos que da la Secretaría de Salud federal al respecto.
Se debe buscar un repelente que esté autorizado por la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA por sus siglas en inglés), lo cual puede comprobarse en los etiquetados del producto que elijas.
También hay que fijarse que el repelente elegido contengan alguno de los siguientes ingredientes activos: DEET, Picaridin o KBR 3013, Para-menthane-dio (PMD) e IR3535. En estos productos existe un nivel de toxicidad muy pequeño, siempre y cuando contenga la etiqueta EPA.
Otra opción son los repelentes naturales, los cuales son hechos con diversas plantas aromáticas; las ventajas es que son amigables con nuestras mascotas y las plantas de ornato que tengamos en casa; el aroma es agradable y también es mejor para nuestra piel.
Lo que hay que tomar en cuenta es que los repelentes orgánicos no matan al insecto solo lo mantienen alejados.
¿Cómo hacer un repelente natural?
Hacer tu propio repelente es muy fácil y económico, solo basta conseguir los ingredientes y darse un poco de tiempo para realizarlo. Te compartimos la receta que publicó la Universidad Veracruzana.
Ingredientes:
*Medio litro de agua
*Dos cucharaditas de aceite, puede ser lavanda, limón o algún otro para cuerpo
*Albahaca (previene las reacciones alérgicas del piquete del mosco)
*Citronela (por su fuerte aroma)
*Menta (por su olor y propiedades antisépticas).
En el caso de las plantas, toma en cuenta un puño como medida o un ramillete pequeño.
Una vez conseguidos los ingredientes, va la fase de preparación: las plantas son lavadas y picadas finamente; después se pone a hervir el agua durante media hora y pasado ese tiempo se agregan las plantas junto con el aceite, se mezcla y se deja que dé un hervor. Se retira del fuego y se deja reposar hasta que se enfríe. Se cuela la mezcla y se vierte en un recipiente con atomizador.
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¿Cómo aplicar los repelentes para que sean eficaces?
En el caso de los repelentes químicos, la Secretaría de Salud federal aconseja seguir siempre las instrucciones de uso que vienen en los empaques de los productos.
Si estás utilizando crema de protección solar, primero aplica la crema y después el repelente contra mosquitos.
No usar repelentes químicos en bebés menores de dos meses; en los más grandes es mejor aplicar el repelente en las manos del adulto y de ahí dispersar en el infante.
No colocar repelente en ojos, boca, manos o piel irritada. Evitar la ingesta.
Tanto en los casos del repelente químico como orgánico este debe aplicarse varias veces al día y a una distancia de unos 10 a 15 centímetros de la piel para que se impregne mejor.
También se recomienda, en el caso de los bebés e infantes, que usen pantalón y blusa manga larga, colocar pabellón en las cunas o camas. Igual se puede colocar en las ventanas de la casa mallas contra mosquitos.
Finalmente, la mejor prevención es mantener los patios limpios y no acumular agua en recipientes; en el caso de los floreros cambiar el agua todos los días.
