Con termos de café y atole recorre las calles de la ciudad, don Salvador Guízar Hernández. Ya alcanzó los 15 años vendiendo las mejores bebidas calientes, explica don Salvador Guízar Hernández, quien expresa que cuenta con una clientela habitual que lo espera para disfrutarlas.
El secreto de Don Salvador para el sabor de sus bebidas
Del porqué de su éxito, dice que la forma en que elabora sus bebidas es especial, le dedica todos los días tiempo y su receta secreta para siempre ofrecer una bebida con mucho sabor.
En entrevista, comparte los ingredientes que utiliza y señala que, además de un buen grano de café, le agrega piloncillo y canela, que es una receta familiar michoacana que gusta mucho en Xalapa.
Llegó a Xalapa de Cotija, Michoacán, hace alrededor de 16 años. De su apellido Guízar, comenta que hay quien afirma en su familia que el obispo Rafael Guízar y Valencia, era tío lejano de su papá, pero en realidad no hay pruebas documentales de ese parentesco.
En Xalapa tiene 15 años vendiendo la aromática bebida a su clientela.
Platica que comenzó su negocio vendiendo pambazos, ensaladas, flanes y gelatinas que elaboraba su esposa, pero al fallecer hace dos años, solo ha seguido vendiendo café y atole.
La motivación de Salvador Guízar
Antes, comenta con tristeza, su necesidad económica era muy grande y tenía que buscar vender lo más posible para atender los gastos de la casa, pero ahora con la falta de su esposa y que sus hijos ya trabajan pues ya no tiene que buscarle tanto.
A sus 66 años, dice que le gusta mantenerse activo y el trabajo de llevar café y atole caliente a sus clientes que le han preferido durante más de una década, le hace seguir adelante.
Indica que le agrada mucho ser una persona que es apreciada por sus conocidos. Eso lo alienta a seguir adelante.
De sus preparaciones, dice que lo fuerte es el café de olla con piloncillo y canela, además de atoles de fresa, vainilla o chocolate, entre otros.
Tanto el vaso de café como de atole los da en 10 pesos. Sale a vender tanto en la mañana como por la tarde, durante unas horas.
Indica que obviamente vende más durante esta temporada invernal cuando hace falta algo caliente para sentirse mejor, pero también días intensos de calor vende muy bien su café.
El negocio de venta de café es bondadoso porque le ha dado para sacar adelante a su familia y para ser una persona productiva en tiempos complicados. Su zona de comercio es el centro, en varias dependencias donde lo conocen y hasta los esperan por las mañanas y tardes.
"Gracias a Dios", expone que siempre sale para los gastos y un poco más. El ser conocido como alguien que vende calidad le produce buenos dividendos tanto económicos como de cariño con su clientela, concluyó.