Aunque resulta complicado competir con las grandes papelerías, para negocios familiares dedicados a este ramo, ha sido bueno este año.
Miguel Ángel Gómez Juárez, encargado de la papelería Maya, explica que considera que su negocio es "para emergencias" tanto de papás como de estudiantes, “porque les vendemos lo que requieren cuando les encargan una tarea urgente y no pudieron adquirirlo en el centro y entonces vienen con nosotros para surtirse y así poder elaborar sus tareas”.
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¿Cómo han sido las ventas de papelerías familiares?
Indica que en este inicio de ciclo escolar han tenido ventas aceptables, mucho mejores que en los tres anteriores cuando estuvo la pandemia, “claro que sabemos que no hay forma de competir con quienes ofrecen descuentos por surtirse toda la lista escolar en su negocio, pero nos ha ido bien”.
En las papelerías pequeñas, las que se pueden encontrar en las colonias, “los estudiantes y padres vienen porque requieren de una libreta, lapicero, pegamento u una cartulina; nuestros clientes son principalmente personas que viven cerca de nuestra calle: Emiliano Zapata, de la colonia Guadalupe Rodríguez”.
“Nos compran cuando requiere de una a tres unidades y consideran que les saldría más caro irse al centro, por lo que recurren a nuestro negocio que si bien buscamos dar costos bajos, no se puede competir con los negocios grandes, pero somos más cercano; sabemos que esa es nuestra misión, por ello también tenemos jugos, refrescos, chocolates y productos de una mercería, porque aprovechamos para venderles un antojo o cualquier otros productos que necesiten”.
Una papelería de una zona que no está céntrica como es está se convierte poco a poco en una tienda de abarrotes, porque se busca abarcar a más clientes.
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Si bien, dice que los productos de papelería son su primera misión y son una forma de atraer a los estudiantes, se han introducido galletas, algo de ropa, moños, peines y cepillos, “que son productos que en cualquier momento se necesitan en un hogar”.
Este negocio, como muchos años, dice, son negocios familiares que se instalan en la parte del frente de una vivienda “y si como nosotros quedan cerca de un lugar concurrido, pues creo que tendrán éxito porque siempre hay personas que requieren una cartulina, pegamento, un moño o pasadores, todos esos artículos y más que tenemos en nuestra papelería”, concluye.